Recorriendo Europa encima de una Vespa 50

FERROL CIUDAD

CEDIDA

Un viaje excepcional

08 jul 2021 . Actualizado a las 19:56 h.

El aventurero calabrés Andrea Fucile, que está recorriendo Europa en una Vespa 50 con el único objetivo de contarle a la gente que «el mundo es lindo», llegó ayer a Ferrol. Este italiano de 33 años partió el día 8 de mayo de Calopezzati, en la provincia de Cosenza (Italia). Andrea, que ha vivido ya muchas aventuras va dando cuenta de su viaje y de cada etapa en sus redes sociales. Sus aventuras le han dado para escribir tres libros y crear una red de contactos en todo el mundo que le ha generado sorpresas como en su llegada a Liverpool, donde le aguardaban 45 vespas que le acompañaron en su recorrido. Aquí, en Ferrol, también le esperaban Jonatan Rivas y Basilio Baamonde. A bordo de su vieja Vespa 50 Special, cubierta de pegatinas, cargada hasta los topes no supera los 50 kilómetros por hora, ha pasado por Suiza, Alemania, Inglaterra, Irlanda, Francia, España, bajará por Portugal e intentará llegar a Marruecos y Argelia. En la mochila un par de jerséis, una chaqueta gruesa, una chaqueta encerada para los días de lluvia, una cámara Go-Pro, un PC, dos móviles y una bolsa con repuestos. Su objetivo es mostrar, a través de sus redes sociales y el canal dedicado de YouTube, «lo hermosa que es la gente, que el mundo no da miedo, de hecho, es maravilloso». Le gusta viajar solo, pero desde Barcelona le acompaña la romana Giuseppina Serra con una Vespa 200 un poco más rápida que la de Andrea.

Una virgen peregrina

Por Ribadeo entró ayer en Galicia la peregrinación Madre Ven, puesta en marcha por un grupo de laicos y sacerdotes que llevan por toda España una imagen de la Inmaculada Concepción traída desde Éfeso, en Turquía. La imagen recorre en peregrinación los lugares más significativos de la espiritualidad mariana en España. El viaje inició el 1 de mayo en Zaragoza y está previsto que concluya el 12 de octubre, fiesta de la Virgen del Pilar, junto el Sagrado Corazón de Jesús en el Cerro de los Ángeles en Madrid, rememorando la visita de la Virgen María al Apóstol Santiago. Tras su llegada por vía marítima a Ribadeo su periplo viajero le llevará a la catedral de Mondoñedo. Luego visitará Abadín, Vilalba, As Pontes, y entrará en Ferrolterra a través de la iglesia de Santa Rita de Xuvia el próximo día 15. Ese mismo día pasará por el monasterio de O Couto y quedará a última hora en la iglesia de San Francisco de Ferrol. Carlos de Arriba, un joven ligado a la Cofradía de la Merced, es el coordinador de la recepción a esta imagen peregrina en Ferrol. Aquí, el día 16, la Virgen de Éfeso participará en los actos de la Armada con motivo del día del Carmen en la ciudad. Por la tarde estará expuesta en la capilla de los Mercedarios en Amboage en donde a las 17.30 se desarrollará un acto mariano y posteriormente será trasladada a San Julián. De ese templo partirá el día 17 al puerto para tomar la lancha de Mugardos y cruzar la ría para ser recibida luego en Pontedeume. Está previsto que siguiendo desde ahí el Camino Inglés llegue el día 25 a Compostela. La diócesis de Getafe (Madrid) es donde comenzó a fraguarse el proyecto. Desde su partida ha estado acompañada por fieles de las parroquias por las que pasa.

¡Gracias voluntarios!

Los voluntarios de Xeración participaron ayer en otra acción del proyecto Retake. Doce jóvenes de procedencias tan diversas como Grecia, Rumanía, Holanda o España llevaron a cabo una tarea de limpieza de la zona más próxima al auditorio de Ferrol por donde discurre el Camino Inglés a Santiago. La acción forma parte de las actividades en las que participa el voluntariado de esta oenegé coordinada por Fran Sequeiro. Es habitual que periódicamente hagan batidas de limpieza en diferentes zonas de la ciudad. Les hemos visto en otros barrios y a lo largo de los próximos meses tienen previsto actuar en playas como Ponzos o Santa Comba. Lo deseable sería que no tuviesen que realizar esta labor, pero desgraciadamente tendrán que seguir aplicando la teoría de las ventanas rotas, que aboga por cuidar los pequeños detalles y evitar que las cosas que están mal se pongan todavía peor. Acciones como esta se agradecen, sobre todo porque nos dan una lección de respeto e implicación para mejorar el patrimonio de todos. Que cunda el ejemplo.