Nuria García, profesional del CHUF: «La terapia ocupacional se convirtió en actividad básica en la pandemia»

Nuria García Gonzalo (Madrid, 1974) es profesora asociada de la Universidade da Coruña en el ámbito de la terapia ocupacional, una labor que forma parte de su actividad profesional diaria, ya que trabaja en el hospital de día del área de salud mental del Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (CHUF). Nuria cuenta que la enfermedad mental o los avatares de la vida encierran a muchas personas en sus casas y su cometido es precisamente liberarlos: «La terapia ocupacional se convirtió en actividad básica durante la pandemia, precisamente cuando más difícil era la Xunta reconoció esta labor».

-¿De qué se ocupan los profesionales de esta terapia?

-La ocupación es lo que nos hace humanos, pero cuando por una enfermedad, un accidente o una situación de vulnerabilidad social las personas no pueden hacerse cargo de las actividades cotidianas sucede que no pueden proyectar a dónde va su vida, porque no pueden hacer lo que quieren. La labor del terapeuta en el hospital de día de salud mental del Área Sanitaria de Ferrol es precisamente posibilitar con sus técnicas y su labor diaria que estas personas puedan participar en actividades cotidianas y a través de ellas darle sentido a sus vidas.

-¿Qué perfil de usuarios están en vuestros programas?

-Son usuarios que tienen necesidades, porque de alguna manera dejaron sus estudios, sus trabajo y sus relaciones con otras personas por una patología mental. Son personas que llevan tiempo en casa y necesitan volver a hacer cosas.

-¿Cómo se consigue salir de casa y superar la barrera de la enfermedad mental?

-Con herramientas de evaluación de terapia ocupacional para analizar qué le está pasando a esa persona. Tras la valoración se aborda el caso desde diferentes técnicas grupales para que vuelva a participar en la actualidad.

-Por ejemplo...

-Hay, por ejemplo, un proyecto que llevamos a cabo durante la pandemia y consistía en usar los recursos que las ciudades de la comarca nos ofrecían para participar desde la distancia. Así, en el Concello de Narón se organizó una exposición que se titulaba Un mundo cheo de diversidade, bueno pues desde terapia ocupacional de psiquiatría del CHUF se tomó ese proyecto que estaba abierto a toda la ciudadanía y se potenció que nuestros usuarios participasen. Les pedimos que buscasen qué actividades cotidianas eran importantes para ellos, cosas como caminar, hacer la compra... e hiciesen una composición de cada una de esas actividades con una mascarilla. Cada uno me fue enviando esas creaciones y remití las fotos a la exposición, en la que participamos. Como estaban los concellos cerrados nos autorizaron a ir a la muestra y muchos usuarios pudieron verse, estar conectados y reflexionar sobre las cosas que eran una motivación en sus vidas. Todo con las medidas que había que tomar.

-¿En el día a día qué acciones desarrollan?

-Trabajamos por proyectos, no hay nada estático que dure diez años, según las necesidades de cada grupo se crean los programas: van desde participación en la comunidad al cuidado personal o visitas a museos... No conmigo, sino ellos mismos. Promovemos qué van a hacer el fin de semana, vemos las ofertas que tiene cada zona para que puedan participar...

-¿Hay suficientes actividades o sigue habiendo barreras?

-Muchas han disminuido con la pandemia porque creo que los concellos se han esforzado en ampliar la faceta cultural y nos ha abierto muchas vías. Ahora acabo de hacer un curso de Cultura Digital que organiza el Concello de Ferrol y que me ha parecido estupendo. Las asociaciones hemos podido tener contacto con otros grupos para conectarnos y seguir transformando la ciudad en la que viven

-¿Cómo ve la figura del terapeuta ocupacional en el sistema?

-El terapeuta ocupacional es una figura muy valorada tanto por los profesionales, como los usuarios con los que estamos. Nuestro objetivo es trabajar y que estas personas alcancen día a día las pequeñas metas que se marcan.

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