La portuguesa Carolina Mendes y el vasco Adur Amatriain ganan el Abanca Pantín Classic
FERROL CIUDAD
El surfista vasco solo tiene 16 años y era la primera vez en la que competía en la prueba de Valdoviño
04 jul 2021 . Actualizado a las 21:06 h.La surfista portuguesa Carolina Mendes y el vasco Adur Amatriain son los ganadores de la 34 edición del Abanca Pantín Classic, una prueba de las Qualifying Series, puntuable para la World Sur Legue. El campeonato, que suele disputarse entre finales de agosto y los primeros días de septiembre, se trasladó, en esta ocasión, a esta primera semana de julio y las olas, habituales en el arenal valdoviñés, se echaron en falta. «La Fábrica de Olas» como se conoce a esta playa entre los surfistas, se tomó un pequeño descanso. Durante tres días la competición tuvo que detenerse, aunque al final el mar acompañó a la prueba con unas olas pequeñas, aunque suficientes para finalizar la competición.
Esta vez no se pudo disfrutar del espectáculo que ofrecen los surfistas, con maniobras radicales en unas olas poderosas. Todo se decidió por la pericia de los surfistas a la hora de buscar el mejor lado de la playa, así como a la hora de elegir las olas. Incluso tuvo algo que ver la suerte, que siempre influye, en cualquier deporte.
La primera final de la jornada fue la femenina, entre la portuguesa Carolina Mendes y la canaria Melania Suárez. La española hizo una buena elección de olas y se plantó en los últimos minutos con una clara ventaja. La lusa encontró la ola que había estadio buscando durante toda la final en el último momento, una ola bien surfeada, bien puntuada, que le permitió dar la vuelta a las cifras y hacerse la victoria por un ajustado 8,17 a 8.
Juventud contra experiencia
En la final masculina sorprendió el triunfo del vasco Adur Amatriain, hijo de Ibón Amatriain, que compitió en Pantín en un buen número de ocasiones. El surfista del País Vasco, que solo tiene 16 años, se impuso al veterano Joan Durú, uno de los mejores surfistas de Europa y del mundo, que era la decimoséptima vez que competía en Pantín y que ya fue finalista en el año 2012.
El joven Amatriain salió con fuerza, surfeando todas las olas que encontró, mientras que el francés esperó su ola y la encontró, en la mitad de la final, puntuada por los jueces con un 9,33. Al galo le hacía falta una segunda ola, aunque no fuera muy buena, pero el tiempo pasó y la ola no llegó. El surfista vasco daba la gran sorpresa y se hacía con la victoria. Para él fue llegar y besar el santo, ya que era su primera participación en el Pantín Classic. «Mejor es imposible, era mi primera participación en Pantín. Ha sido increíble, venir a esta playa y competir con surfistas de un gran nivel, con gente a la que admiras, con amigos, personas que están en el top mundial. Ganar ha sido una pasada para mí», dijo.
Reconoce que admira a su rival Joan Durú. «Claro que lo admiro, es uno de os mejores surfistas del mundo. Entré al agua sin presión, no tenía nada que perder, haber llegado a la final ya era algo increíble. He salido al agua dispuesto a disfrutar, pero me han salido bien las cosas».
«Galicia es una pasada»
Ni una sola queja sobre un Pantín Classic complicado y sin olas. «Bueno, me da igual, Galicia es una pasada. He hecho muchas cositas estos días en Pantín y he disfrutado mucho».
Destaca que no se atreve ni a valorar lo que significa este triunfo. «Es que ahora mismo no puedo decir nada —señaló— es que ni me creo que yo he ganado el Pantín Classic. Para mí ganar un QS es el mayor logró que ha conseguido desde que hago surf», indicó.
La surfista lusa
«Todavía estoy muy emocionada —señaló la surfista portuguesa al salir del agua— ha sido una final increíble. Estoy muy contenta de volver a Pantín, es un lugar increíble, muy bonito. Además, esta vez he conseguido la victoria. Es mi segundo triunfo de una prueba clasificatoria para la World Surf League, ya que también gané la prueba de Zarauz, en San Sebastián».
Explicó que su estrategia en la final fue tener paciencia y esperar su ocasión. «Tenía una amiga en la playa, observando las olas, y yo veía que me hacía señales con las manos, que me fuera al otro lado. Yo comencé a remar para ir a la zona en la que ella me indicaba y al final la ola ganadora apareció. En el último minuto conseguí cambiar la situación y hacerme con la victoria en la final».
La portuguesa indicó que había sido un Pantín Classic muy complicado. «Ha sido todo muy difícil, hubo tres días sin olas, por lo que la competición se tuvo que comprimir mucho. Ahora ya no importa, estoy muy contenta por haber ganado esta prueba, que significa mucho para mí, ya que es la segunda prueba de las Qualifying Series en la que logró el triunfo. Ha sido increíble y me da muchos ánimos para continuar peleando». «Perdona mi portuñol», señaló al final de la entrevista la competidora lusa.