Fundó el primer club de la ciudad con Luis Cano e inculcó su amor por el deporte a su familia
05 jun 2021 . Actualizado a las 20:17 h.A los 85 años falleció uno de los pioneros del yudo en Ferrol, Leopoldo Cánovas. Empezó cuando estaba enrolado en Infantería de Marina y siempre estuvo ligado al mundo del deporte y de la actividad física. Como deportista ganó los campeonatos de España Marina diecinueve veces consecutivas, incluso, uno de ellos consiguió el título con el menisco roto, rememoran sus hijos. Y posee el récord de más títulos, recuerda Ricardo Trillo, uno de sus alumnos, ahora en el club Bitácora. A sus hijos también trató de inculcarles su amor por este deporte, tanto a Juan Carlos, Francisco Javier, ya fallecidos como a Poldo, comenta su cuarta hija, Coté.
Con Luis Cano fundó el primer club de Ferrol, Jita Kyoei -ayuda y prosperidad mutua- con el que nació la gran historia del yudo en la ciudad. «Con él muere un trocito de historia», lamentaba Trillo. Recuerda que ambos separaron sus caminos, que no se buena relación, y abriendo, Leopoldo, el club Kawaishi, que formaba parte de la organización juvenil española de yudo, y Luis, el Judo Club Ferrol. «Yo empecé ahí con Leopoldo. Recuerdo que era su pasión. Le encantaba llevarnos a correr a Chamorro, me acuerdo subir la cuesta con él a caballito, o en Caaveiro nos mandaba agarrar lo que encontraba, un tronco. Ahora se lleva mucho eso, pero está todo inventado», comenta entre anécdotas.
Cánovas abrió camino a la igualdad en este deporte. «Tenía un equipo femenino muy potente que iba por los pabellones a hacer exhibiciones», comenta Trillo. Entrenó a la primera mujer en España que ganó un campeonato de yudo. También trabajó como masajista en Ferrol y preparó a muchos militares y policías para entrar en el servicio. Y esta pasión le llevó a seguir practicando deporte hasta después de jubilarse.