El precio medio del alquiler es el más barato de las siete ciudades gallegas
22 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Basta darse un paseo por el centro de Ferrol para comprobar que cada vez son más los bajos comerciales que lucen el cartel de «se alquila» o «se vende» en el escaparate. La crisis que atraviesa el pequeño comercio y el cierre de oficinas bancarias ya había vaciado muchos locales antes de la pandemia, pero el covid-19 vino a poner la puntilla y ahora son muchos más los que se han quedado sin vida entre sus muros.
Según un informe presentado hace pocos días por la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), Galicia cuenta en la actualidad con unos 7.000 locales comerciales vacíos, de los que 5.580 se encuentran en las siete ciudades. Son 1.605 más que los que había en agosto del 2019, cuando la cifra ascendía a 3.975, según la encuesta realizada entonces por Fegein entre sus empresas asociadas.
En el caso concreto de Ferrol, el informe revela que la cifra de locales sin actividad comercial pasó de 200 a 300 en los últimos quince meses, lo que arroja un escenario similar al de Santiago, donde la cifra subió de 350 a 450. Pero ninguna urbe gallega se libra de la bajada de persianas, y así, los bajos vacíos en A Coruña pasaron de 1.100 a 1.400; en Lugo, de 225 a 300; en Ourense, de 800 a 1.200; en Pontevedra, de 200 a 380; y en Vigo, de 1.100 a 1.550.
De la situación que se vive en Ferrol pueden hablar largo y tendido profesionales como Arcadio Ares, de la inmobiliaria Callao, quien certifica que la cifra de locales vacíos crece día a día, sobre todo en el centro de la ciudad. «Los elevados precios que había en la calle Real y otras zonas del centro espantaron a muchos emprendedores y los llevaron hacia la carretera de Castilla, que se ha convertido en la nueva milla de oro», apunta este agente inmobiliario.
Eso sí, Ares reconoce que ahora se negocia más y los precios han bajado, tal y como revela el informe de Fegein. De 5 euros el metro cuadrado se ha pasado a 4,20 en poco más de un año, lo que sitúa a la urbe naval como la ciudad gallega mas barata para alquilar un bajo. «Yo siempre le digo a los propietarios que más vale bajar el precio y ganar algo que tener un local parado que solo ocasiona gastos y deterioro».
