El campus oferta hasta 15 proyectos de investigación a los alumnos que cursan el bachillerato de excelencia en ciencias, cuyo número aumenta este año en la ciudad
21 dic 2019 . Actualizado a las 09:49 h.El nuevo bachillerato de excelencia en ciencias y tecnologías, también conocido como Stembach, se hace más fuerte en Ferrol. Si el curso pasado solo ofertó esta nueva modalidad de bachillerato el IES Sofía Casanova, en el presente año académico se han incorporado al programa otros dos centros de la urbe naval -el IES Concepción Arenal y el colegio Tirso de Molina-, por lo que el alumnado interesado en cursarlo se incrementará de forma considerable.
Apuntarse a este programa es voluntario y quienes finalmente se decidan a hacerlo deberán enfrentarse a un reto que requiere dedicación y esfuerzo: el desarrollo de un proyecto de investigación en colaboración con profesores universitarios. En la urbe naval, un total de cuatro centros del campus de Ferrol se han involucrado en la iniciativa -la Escuela Universitaria de Diseño Industrial, la Facultad de Enfermería y Podología y las Politécnicas de Esteiro y Serantes- y esta misma semana presentaron sus propuestas de investigación a los tres centros de la ciudad que ofertan el Stembach, pero también a otros dos institutos de la provincia coruñesa: el Agra do Orzán de A Coruña y el Miraflores de Oleiros.
«Hay proyectos presenciales, que requieren que los alumnos vengan al campus una o dos veces al mes, pero también hay otros que no lo son, por lo que nuestras propuestas para el Stembach no se limitan solo a los estudiantes de Ferrol», apunta Fran Bellas, coordinador del programa en el campus.
Tras la presentación celebrada esta semana en Esteiro, los alumnos deberán escoger ahora el proyecto de investigación en el que quieren trabajar a lo largo del curso y que deberán presentar ante un tribunal a principios del año 2021. La oferta incluye un total de quince proyectos de diferentes ámbitos -desde la inteligencia artificial hasta la automoción, pasando por el estudio de nuevos biomateriales o las instalaciones fotovoltaicas-, que serán tutorizados por los profesores del campus.
«El objetivo es despertar vocaciones científicas y tecnológicas entre los estudiantes de bachillerato y, ya de paso, mostrarles las potencialidades del campus, para que, cuando tengan que dar el paso a la universidad, se matriculen en alguna de las carreras que se imparten aquí», explica Fran Bellas.