Los cuatro primeros ejemplares de tilia americana que adornarán la plaza llegarán el lunes a la ciudad en dos camiones procedentes de un vivero de Holanda
05 dic 2019 . Actualizado a las 08:56 h.Las operarios que se encargan de la reforma de la plaza de Armas continúan con la colocación de los grandes bloques de piedra que conformarán el firme de las zonas que se pretenden abrir a la ciudadanía en Navidades, pero, a la par, están acometiendo los preparativos para acoger a los primeros elementos vivos que poblarán ese céntrico espacio. Y es que el lunes está previsto que lleguen a la ciudad los cuatro primeros ejemplares de tilia americana que van a conformar la masa arbórea que contempla el proyecto Lugar de todas para Armas.
Según informó el arquitecto redactor del mismo, Carlos Pita, que también es el director de la obra, se prevé que a las ocho de la mañana del lunes llegue a Ferrol el primer camión con dos ejemplares y a las 11.30 el segundo, con otros dos. Los tilos proceden de un vivero de Holanda y los 17 restantes, hasta completar los 21 que figuran en el proyecto, no se plantarán hasta finales de enero o principios de febrero, en función de cuándo finalicen las obras de reforma de la plaza.
La plantación de estos primeros cuatro tilos tendrá que realizarse de inmediato, para evitar problemas de enraizamiento, aunque se trata de ejemplares preparados en el vivero para que no sufran con este tipo de operaciones.
Los obreros trabajan estos días en la preparación de los cuatro alcorques en los que se van a plantar, que están situados en la parte frontal del palacio municipal, dos en línea con la calle Dolores y los otros con Galiano. Los dos primeros ya están listos y una pala mecánica trabajaba ayer por la tarde en la limpieza del espacio en el que hoy se prevé acometer el encofrado de los otros dos.
Mato habla de cautela
El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, expresó ayer su deseo de que una gran parte de la plaza de Armas pueda quedar liberada para el uso y disfrute de los ciudadanos estas Navidades, «con toda la cautela, porque aunque las obras avanzan a una velocidad razonablemente buena, el tiempo es un gran condicionante».
En cuanto a la plantación de los árboles, explicó que se trata de elementos vivos y ejemplares muy delicados, que deben preservarse por encima de todo, para que no sufran y, a la par, se respeten las garantías de los viveros. De ahí que se muestre partidario de sean los técnicos los que decidan cuándo se plantan, independientemente de que están para Navidades o no.