Los músicos de la Banda Ferrolá llevan al juzgado la lucha por su laboralización
FERROL CIUDAD
El colectivo denuncia que el Concello abona sus servicios mediante un sistema de becas «fraudulento»
19 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Llevan más de un mes haciendo resonar sus demandas a través de las redes sociales y, ayer mismo, esas mismas reivindicaciones llegaron al Juzgado de lo Social número 1 de Ferrol, donde tuvo lugar el juicio por la laboralización de los miembros de la Banda de Música Ferrolá.
En la demanda colectiva presentada ante los tribunales, un total de 32 miembros de la agrupación denuncian que el Concello lleva años pagando sus servicios a través de un sistema «fraudulento» de becas y reivindican que se regule su situación mediante un contrato, para poder cotizar a la Seguridad Social y disfrutar de los mismos derechos que el resto de trabajadores. Tras la vista, el abogado que representa a los músicos, Borxa Colmenero, del despacho Pérez Lema de A Coruña, explicó que la demanda basa sus fundamentos en la existencia de una «relación laboral» entre el Ayuntamiento y los miembros de la banda. «O Concello defende o sistema de becas porque di que a banda ten unha finalidade formativa, pero isto non é así porque os seus membros son músicos profesionais que na maioría dos casos levan na agrupación máis de dez anos seguidos e tiveron que pasar unha proba de nivel para ingresar nela», esgrime.
Además, el letrado entiende que en este caso confluyen todos los elementos necesarios para la existencia de una relación laboral, «xa que os músicos prestan un servicio (los conciertos) ao Concello, que é quen programa as actuacións, paga os vestiarios e os instrumentos, ademais de abonar aos músicos nóminas de 200 euros mensuais máis dúas pagas extras ao ano».
Por su parte, el abogado que representa al Concello, del despacho ferrolano Lama y Asociados, defendió ante el juez que el sistema de becas es correcto y se ajusta a derecho, ya que los músicos de la banda reciben una «formación continua» y, además, ingresaron en la agrupación mediante una mera prueba de nivel y no a través de un concurso de méritos y capacidades, que es el procedimiento normal para la provisión de puestos de trabajo en la administración pública.
Los miembros de la agrupación llevan sin percibir las becas desde el pasado mes de mayo, pero, pese a ello, continúan asistiendo a los ensayos cada viernes por la tarde en el Auditorio. El juicio quedó visto para sentencia.