Los trabajos se iniciaron ayer y finalmente incluirán una capa de aglomerado ante la alta siniestralidad de la vía
24 oct 2019 . Actualizado a las 11:51 h.La Diputación de A Coruña inició ayer los trabajos para intentar que el punto negro de la carretera de Covas deje de serlo. Operarios y maquinaria trabajan en la DP-3603 para tratar de reducir el número de salidas de vía producidas en la curva de San Pedro, el primer y cerrado giro a la izquierda que se encuentran los conductores que emprenden la bajada desde el alto de A Bailadora. Allí, los vecinos denuncian desde hace años la concurrencia de continuos accidentes, especialmente cuando llueve, y reclamaban una solución.
Técnicos provinciales se desplazaron hace tres semanas hasta el lugar para estudiar cuál podía ser el problema. Y tomaron la decisión de aplicar una capa de slurry, un material antideslizante, para mejorar la adherencia en ese punto. Sin embargo, finalmente se ha optado por otra opción, más cara pero que la Diputación considera justificada por el número de siniestros contabilizados en el lugar: una capa de aglomerado discontinuo M10.
Los trabajos se centraron ayer en la curva de San Pedro, la más peligrosa, aunque está previsto continuar con la intervención en cuanto las condiciones meteorológicas lo permitan.
La Asociación de Vecinos de Covas saludó la aplicación de esta medida y apuntó que además se ha procedido a la reposición del quitamiedos derribado, punto por el que se salió alguno de los coches, que no sufrió mayores consecuencias al quedar retenido por los troncos de los árboles. Su presidente, Manuel Sendón, trasladó que desde su entidad agradecen las gestiones realizadas por el alcalde, Ángel Mato, «en la rápida solución del problema». No obstante, alerta a los conductores de la peligrosidad del tramo entre A Bailadora y La Cochera, especialmente los días de lluvia.