El tren entre A Coruña-Ferrol es el más lento de España

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

FERROL CIUDAD

Uno de los trenes que cubre el trayecto entre A Coruña y Ferrol
Uno de los trenes que cubre el trayecto entre A Coruña y Ferrol JOSÉ PARDO

La velocidad media oscila entre los 52 y los 55 kilómetros por hora, dependiendo de la frecuencia

24 sep 2019 . Actualizado a las 11:25 h.

Las líneas ferroviarias españolas experimentaron en los últimos treinta años una transformación radical, centrada en la apuesta por la alta velocidad para compensar el abandono que sufrió el ferrocarril durante buena parte del siglo XX. Pero también se ha alumbrado una red a dos velocidades, en la que hay territorios e incluso ciudades que han quedado descolgadas de las mejoras, bien por el período de crisis económica entre el 2008 y el 2015, bien porque nunca se consideró rentable conectarlas mediante trazados ferroviarios de altas prestaciones. El abandono generalizado de la red convencional con menos demanda se suma a esta realidad de una red hemipléjica.

Lugo, y en mayor medida Ferrol, son dos de las ciudades gallegas que han quedado al margen de estos avances, que en Galicia ya permiten recorrer los 155 kilómetros entre A Coruña y Vigo en 80 minutos. Pero quizás la situación de Ferrol es más dramática, al situarse en una zona con una alta densidad de población, pues las comarcas de A Coruña, Betanzos y Ferrolterra están cerca de los 600.000 habitantes.

A pesar de este contexto altamente urbanizado, La Voz ha podido constatar que, bajo ciertos parámetros, el A Coruña-Ferrol es el tren más lento de España, con una velocidad media situada en la horquilla entre los 52 y los 55 kilómetros por hora de velocidad media, dependiendo del tipo de tren y la frecuencia. Para compararlo se eligieron trayectos de media distancia entre poblaciones relativamente importantes, por lo que podría haber tramos más lentos en recorridos más cortos donde el trazado esté en muy malas condiciones. La comparación se hizo con conexiones ferroviarias con kilometrajes relevantes en ancho ibérico, pues es evidente que en la red de ancho métrico de la extinta Feve hay registros incluso peores que en la conexión con Ferrol.

Así, este trazado cuenta con una velocidad media inferior a la de líneas como Badajoz-Ciudad Real o Zaragoza-Teruel, conexiones que el propio Gobierno central ha reconocido que es necesario mejorar.

Contrastes en el eje atlántico

La comparación con el tramo del eje atlántico renovado entre A Coruña y Vigo refleja a la perfección la Galicia a dos velocidades. Entre las dos principales ciudades gallegas los trenes pueden circular a una velocidad punta de 250 kilómetros por hora en buena parte del recorrido, lo que supone una velocidad media de más de 118 km/h, que se explica por las paradas intermedias y las consiguientes aceleraciones y deceleraciones a lo largo del recorrido. Como dato comparativo, la velocidad media más alta en España es la de la línea Madrid-Barcelona, con 249 kilómetros por hora.

Estas prestaciones, que permiten cubrir los 155 kilómetros entre las dos principales ciudades gallegas en solo 80 minutos, terminan en la estación coruñesa. Si se quiere seguir hacia el norte, hacia Ferrol, la velocidad máxima se reduce drásticamente y pasa de 250 a 105 kilómetros por hora. Dicho de otra manera, los trenes que unen Ferrol con A Coruña son más lentos que los coches que circulan por la autopista del Atlántico pagando 4,75 euros por el peaje. Solo el ferrocarril de vía estrecha entre Ferrol y Vegadeo tiene una velocidad máxima inferior a esta: 80 kilómetros por hora. 

Un trazado de hace un siglo

El anacronismo de un trazado con una antigüedad de más de un siglo se refleja en una comparación que es muy visual. Los 69 kilómetros del trazado entre A Coruña y Ferrol se recorren en casi el mismo tiempo que lleva cubrir los 155 que separan A Coruña y Vigo. La mayor parte de las frecuencias -exceptuando el tren hotel, que es al que le lleva más tiempo- oscilan entre los 66 y los 78 minutos. Un tren lentísimo y con muy pocas frecuencias, y con una inversión de la marcha en la estación de Betanzos-Infesta que penaliza los tiempos de viaje entre seis y ocho minutos. A todo esto hay que sumar un trazado sinuoso que reduce la velocidad máxima en muchos puntos y la falta de electrificación. El viaje en coche se hace en 40 minutos y el autobús tarda algo más de 50. Así, en contextos muy similares, se escribió la historia del final del ferrocarril en muchos territorios.

Este contexto ha propiciado que la demanda en la línea que une Ferrol con A Coruña sea cada vez más baja. En esta línea hay en la actualidad 50 circulaciones semanales -que incluyen trenes de media y larga distancia y mercancías-, mientras que entre Ferrol y Ortigueira, por poner un ejemplo con una línea de ancho métrico, hay 250. Las circulaciones subieron ligeramente entre A Coruña y Betanzos y se estabilizaron entre Betanzos y Ferrol. Pero entre las dos principales ciudades solo hay media docena de frecuencias en ambos sentidos.