Los ferrolanos reciclaron 8.700 litros de aceite doméstico el año pasado

iago codesido / C. L. FERROL

FERROL CIUDAD

ESTEVO BARROS

Los óleos provienen, en su mayoría, de los bidones instalados en la calle

25 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Ferrol se compromete poco a poco con el reciclaje del aceite usado. El año pasado, los servicios que el Concello ofrece para depositar este líquido contabilizaron un total de 8.700 litros, que equivalen a casi ocho toneladas de óleo. Estos registros comprenden tanto aceite vegetal, usado para cocinar, como mineral, más común en maquinaria, si bien este último representa una proporción pequeña dentro del total.

Desde el 2007, Ferrol cuenta con dos vías para que los particulares puedan deshacerse legalmente de un líquido para el que, por ser especialmente contaminante, se contemplan multas en caso de vertidos no autorizados.

Los ferrolanos pueden optar entre llevar el aceite usado al punto limpio o depositarlo directamente en uno de los contenedores instalados en las calles.

Por lo general, estos bidones son la opción preferida. De hecho, el 88 % de los litros depositados el año pasado fue a parar a estos recipientes, pensados exclusivamente para aceite de cocina, ya sea de oliva o de girasol.

En el caso del punto limpio, también se admiten aceites de motor o minerales, si bien de estos últimos «suelen entrar pocos litros», como asegura Juan Rilo, gerente de la empresa concesionaria. En los últimos doce meses, la planta que gestiona Rilo recibió casi 1.000 litros de aceite de 150 personas. «La mayoría de la gente lo trae en garrafas de cinco litros», explica Rilo, cuya empresa se hace cargo de las botellas rellenadas que traen los vecinos. En el caso de los contenedores, sin embargo, son los particulares los que tienen que verter el contenido directamente en el recolector.

En ambos casos, el aceite se almacena en bidones de gran tamaño, que luego son transportados para su reciclaje por gestores autorizados. Allí los depuran para darles una segunda vida más allá de sartenes y fogones. Los aceites usados sirven como carburante para motores diésel con determinadas modificaciones. Además de ser una opción económica, apenas emiten CO2 y azufre en comparación con los combustibles fósiles tradicionales.

Aunque los datos de este año revelan una «conciencia creciente» entre la población, según Rilo, desde la empresa que administra los bidones afirman que la recogida sería más eficiente en otras circunstancias. Esta concesionaria lleva funcionando sin contrato desde finales del 2014, una situación que merma la eficiencia del servicio, como reconocen desde el Concello de Ferrol y la propia entidad.

En el consistorio afirman que ya están trabajando en un nuevo contrato que permitirá instalar nuevos contenedores y vaciarlos con más frecuencia.

El 88 % de las entregas se hicieron en los contenedores distribuidos por el municipio

El Concello prepara un nuevo contrato para potenciar la eficiencia del servicio