Este órgano supramunicipal fue creado en el año 1971 con el fin de atender servicios que afectaran a los municipios integrantes, que como se sabe son: Ferrol, Fene, Mugardos, Ares, Narón, Neda, Cabanas, Valdoviño y Cedeira. Su larga vida está pasando desapercibida por los contribuyentes de esta mancomunidad de municipios, que reúne a los alcaldes periódicamente en bodorrio, para tomar algún acuerdo sobre cuestiones tan menores que ni llegan a ser recogidos en sus respectivas hojas parroquiales. Con el paso del tiempo, esta institución se convirtió en un órgano de escasa actividad. En ocasiones se cambiaron los Estatutos para atacar mejor los problemas comunes, pero todo sigue parecido, y eso es responsabilidad de los numerosos alcaldes de estas serranías que por allí pasaron, y ninguno puede vanagloriarse por lo hecho. Como dijo un día el sabio Juan Gato: la Mancomunidad parece estar formada por un grupo de amigos íntimos, y no se trata de eso.
Les pongo un ejemplo. Ferrol tiene un problema desde hace años con los costes del agua, la traída corresponde a la ciudad departamental como lo viene demostrando en su depuración y mantenimiento, que pagan los ferrolanos, mientras otros municipios usan ese líquido elemento a un precio más barato. Este problema se viene debatiendo en algunos plenos, pero nunca hay acuerdo para pagar todos por igual el sostenimiento del servicio. Es duelo de intereses injusto, que entró en marasmo y nadie se ocupó debidamente de un problema que se debiera resolver en un plisplás. Sé que hacer propósito de enmienda es laborioso y escuece, pero las instituciones se crean para mejorar la vida de los ciudadanos no para vivir unos a cuenta de otros. Con ello no alimento la idea de ahuyentar el acercamiento entre municipios, pero tampoco es razonable aparentar cierta cordialidad dejándose fotografiar en animada conversación, al final abrazos y besos, y a coger camino hasta la próxima reunión.
Ahora estamos en un nuevo comienzo de la municipalidad. Es un buen momento para poner orden y actividad a esta tan necesaria mancomunidad para resolver problemas que los ayuntamientos no pueden por sí solos. Ese es el objetivo fundamental, serio, responsable y saludable, no para que los alcaldes se coñeen unos de otros. Nunca mejor dicho.