Comuneros con miras empresariales

Jose Manuel Jamardo Castro
j. m. jamardo RIBEIRA / LA VOZ

FERROL CIUDAD

CEDIDA

Algunas entidades ponen en marcha nuevos proyectos de explotación forestal

10 jul 2019 . Actualizado a las 10:46 h.

Los incendios forestales son los principales enemigos de las comunidades de montes. Además, estas grandes extensiones de terrenos, en su mayoría, están poco cuidadas, pero algunas entidades se han dado cuenta de que pueden ser una fuente de riqueza e, incluso, ayudar a fijar población. Miles y miles de hectáreas han hecho recapacitar a directivas de estos colectivos, que se pusieron manos a la obra con la finalidad de sacar un mayor rendimiento a unos terrenos que pertenecen a los vecinos. Es el caso de las comunidades de Esteiro y Baroña, que tienen en marcha proyectos empresariales para su puesta en valor y, al mismo tiempo, para que los ciudadanos puedan disfrutar de la naturaleza.

La comunidad de montes Santa Mariña de Esteiro está integrada por unos 140 vecinos y es de las pocas entidades de la zona que cuenta con una cabaña de ganado propia que ellos mismos cuidan. Según explicó la secretaria de este colectivo, Rosario Piñeiro, desde que tienen animales en el monte «hai camiños e está máis limpo». En la actualidad cuentan con unas 18 cabezas de ganado reproductoras, un semental, dos becerros, diez terneros, así como diez caballos, todos ellos de razas autóctonas, y también cachenas.

La representante del colectivo señaló que esta actividad económicamente no es rentable, pero al menos consiguen tener sus propiedades prácticamente limpias. «Dende que temos o gando tan solo tivemos un incendio forestal». La entidad también tiene diez aerogeneradores, por lo que los ingresos de ambas actividades repercuten en el monte. El dinero se invierte principalmente en repoblaciones con árboles de especies autóctonas.

Colaboración de los niños

La intención con estos proyectos es que «o monte teña vida», afirmó. Las plantaciones las llevan a cabo los vecinos y en ellas colaboran activamente los niños del colegio. En los últimos meses plantaron 500 árboles y no descartan repoblar alguna zona con frutales.

Las actuaciones están enfocadas principalmente a sacar algún beneficio al monte. También se persigue que los propietario puedan disfrutar de los parajes y que «non nos coman as silvas. Facemos actividades e incluso paseos para inculcar á xente que é deles, e que o coiden».

La comunidad de montes de Baroña es otra de las entidades que ha visto en el monte unas grandes potencialidades económicas muy buenas. Prueba de ello es que tiene a 11 trabajadores propios, que se encargan de su cuidado y mantenimiento.

El presidente, Ovidio Queiruga, comentó que ellos cuentan en sus terrenos con unos 120 caballos y sobre medio centenar de cabras. También desempeñan otras actividades, como el aprovechamiento de la resina.

Los proyectos de esta comunidad van más allá. Entre sus objetivos está la puesta en marcha de la producción de setas, para la que ya cuentan con el permiso correspondiente, y también la instalación de colmenas para la producción de miel.

Por otra parte, cabe destacar que en Carnota nació hace unos meses una mancomunidad en la que están incluidas la mayoría de las entidades del término. Su presidente, Alberto Caamaño, indicó que el objetivo de esta iniciativa es unir fuerzas para reducir los incendios forestales y ordenar el monte. La intención es «sacarlle máis rendemento e, ao mesmo tempo, que a xente poida gozar destas paraxes».