Mato se zambulle en la aritmética variable para gobernar Ferrol

FERROL CIUDAD

R.P.P.

El alcalde mirará a izquierda y derecha en el pleno para sacar adelante los temas de ciudad

07 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Con sus aliados preferentes, pero también con su rival político natural. Al alcalde le espera un mandato de partido de tenis: mirando permanente de izquierda a derecha. Y viceversa. Ángel Mato se sumerge en la aritmética variable con acuerdos a todas las bandas para intentar paliar la minoría de un gobierno de ocho en una corporación de 25 en la que el PP tiene doce ediles. Y en la que Ferrol en Común, con tres, y BNG, con dos, renunciaron a garantizar la estabilidad de la izquierda integrándose en el gobierno, a pesar de haber levantado la mano para investir a Mato como regidor. Tras una semana decisiva en la que se anunció la ruptura de las negociaciones y el establecimiento de un ejecutivo en solitario, se escenificó un acuerdo de «estabilidade» entre PSOE y FeC -cuyo contenido, por falta de concreción, podría haber firmado cualquier partido de la corporación- y se desveló el reparto de carteras, la cuestión de la subida de sueldos defendida por Mato para concejales y asesores se ha convertido en la primera polémica del mandato. Y puede ser la que evidencie que el muro entre los dos bloques ideológicos no será infranqueable estos cuatro años. «Pues sí, se ha liado», admitía abiertamente el alcalde sobre el debate salarial, aunque insistió en abordar el tema con «naturalidad» y ahora, porque las retribuciones se marcan en el pleno de organización, que se celebrará el jueves.

La buena sintonía que se esforzaban en transmitir ambas partes en la firma del acuerdo entre PSOE y FeC duró dos días. Jorge Suárez ponía sus cartas boca arriba. Y tras desear al gobierno «toda a sorte, porque lle vai facer falta», vía redes comenzaba el jueves a hacer ya oposición: «A cidade ten outras urxencias que as subas salariais», escribió, aludiendo al pacto «infame» de PSOE y PP para quitar sueldos al gobierno en su mandato, y mostrándose en contra de las dedicaciones parciales en la oposición, «que significan retorcer a lei, cobrar o mesmo e poder desenvolver un posto de traballo privado». También el BNG se opone a la subida, reprochando la «falta de sensibilidade» hacia los ferrolanos. Mato rebatió que «no se puede decir en un pasillo una cosa y públicamente otra». Así que de llevarse a pleno, la actualización de salarios puede ser el primero de los temas que salga adelante con veinte votos: los del gobierno y los del PP, que no se ha pronunciado aún.

Reta al PP a un acuerdo

Pero Mato va más allá. Defiende que «si el PP creía que podía gobernar y alcanzar un acuerdo», debía haber entablado negociaciones con el PSOE. Pero «el PP no quería gobernar si no tenía mayoría absoluta. Pues no la tuvo». Y ahora «yo invito a que el PP trate de llegar a un acuerdo, que es lo que tenía que haber hecho», retó en una entrevista en Radio Voz Ferrol (105.4 FM). Tras un mandato en el que «todo fueron disputas, follones y líos», defendió, «no deberíamos repetir lo sucedido». Y añadió que «si alguien quiere apostar por la gobernabilidad vamos a tener cuatro años de posibles acuerdos con todas las fuerzas».

Con el PP, avanza, «voy a hablar de todos los asuntos, sería una irresponsabilidad no hacerlo, pero especialmente en los de ciudad», teniendo en cuenta que muchas cuestiones dependen de la Xunta, como la residencia de mayores. O el impulso a la recuperación de Ferrol Vello. El convenio con Defensa es otro gran tema que los socialistas confían en desbloquear. Y tendrá que ser necesariamente con los populares, después de que fuese una de las cuestiones que decantaron el fracaso del pacto de izquierdas.

También en ellos se apoyará el gobierno para la aprobación de la contratación de servicios que FeC y BNG piden que se remunicipalicen, pero que Mato ya renuncia: «Es una cuestión que debería trasladarse a otro momento en el que el Ayuntamiento regularice su situación, con servicios bajo mínimo» de personal, justificó. De mano de la izquierda podrían venir otros acuerdos para humanizar barrios, peatonalizar o pedir la eliminación del peaje de la AP-9. Y con todos, demandas compartidas como una mejor conexión por tren entre Ferrol y A Coruña. Si finalmente estos temas tienen ocho, diez, trece, veinte o veinticinco apoyos solo el mandato lo dirá. Y todo con las autonómicas al caer.