Cuenta atrás para la «repesca» de las pruebas del selectivo

BEATRIZ ANTÓN / IAGO CODESIDO FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

En la imagen de archivo, alumnos de selectividad en la pasada convocatoria de junio. La CIUG intentará reducir al máximo las posibilidades de aglomeración este año
En la imagen de archivo, alumnos de selectividad en la pasada convocatoria de junio. La CIUG intentará reducir al máximo las posibilidades de aglomeración este año CESAR TOIMIL

Má de 140 alumnos se presentan en Ferrol a la fase obligatoria de la convocatoria extraordinaria, que se traslada a julio

06 jul 2019 . Actualizado a las 21:58 h.

Horas y horas con la mirada puesta en los apuntes, jornadas interminables en la biblioteca para estirar el estudio... Y nervios. Muchos nervios. La historia se repite estos días para los alumnos que el pasado mes de junio suspendieron la selectividad, pero también para aquellos que lograron dar carpetazo a segundo de bachillerato después de las pruebas y se presentan dentro de pocos días por primera vez a los exámenes de acceso a la Universidad. A falta de contar con los cifras definitivas, fuentes de la Comisión Interuniversitaria de Galicia (CIUG) avanzaron que en Ferrol se presentarán alrededor de 140 alumnos a la fase obligatoria de la convocatoria extraordinaria de la ABAU (Avaliación do Bacharelato para o Acceso Universidade), que en Galicia se celebra este año por primera vez en el mes de julio en vez de en septiembre.

«Como toda novedad, habrá que esperar uno o dos años para sacar conclusiones, pero en principio me parece una medida acertada, porque así los alumnos que aprueben la convocatoria extraordinaria de selectividad podrán incoporarse a las clases en la Universidad al principio de septiembre, cuando antes lo hacían casi con un mes de retraso», opina Teresa Sebio, directora del IES Sofía Casanova de Ferrol.

Otros alumnos también se muestran favorables a este cambio de fechas, ya que de esta manera tienen la materia «más fresca» y pueden disfrutar del resto de verano. Los exámenes se celebrarán los días 10, 11 y 12 de julio y, como en la convocatoria de junio, se llevarán a cabo en las dos escuelas Politécnicas del campus. Según las cifras provisionales, de los 144 estudiantes que se presentarán a la fase obligatoria, 80 se examinarán en la de Serantes y 64 en Esteiro.

REBECA LOPEZ

Cristina López: «Con el nuevo calendario podré descansar el resto del verano»

«Cometí el grave error de no dormir durante los tres días que duraron los exámenes para estudiar por las noches». Cristina López, del IES Canido, suspendió las pruebas de la ABAU en junio y tendrá que presentarse a los exámenes de repesca que se celebran la semana que viene. Con ella, otros 140 alumnos se presentarán a la segunda vuelta de la antigua selectividad en Ferrol, en una cita inédita por ser la primera vez que la convocatoria extraordinaria se celebra en el mes de julio.

Cristina encarará los exámenes que empiezan el miércoles que viene con la intención de entrar en Enfermería, aunque reconoce que lo ve difícil. «Dudo que me llegue la nota», confiesa. En Santiago y Coruña, las listas del año pasado cerraron en un 10’5. En Ferrol y Vigo la barrera se situó por debajo, pero la nota de corte fue igualmente alta: 9’5. Por esta razón, Cristina cuenta con un plan alternativo. Intentará cursar Podología -que el curso pasado cerró con un 7,5- para luego entrar en Enfermería con «buena parte de las materias convalidadas», dice. El grado pasaría de durar cuatro a dos años, por lo que sumaría 6 en la universidad.

En una convocatoria marcada por la polémica, Cristina explica que, aunque ella no cursó Filosofía -cuyo examen tuvo que ser aplazado por un error la prueba que se cobró la dimisión del responsable de la CIUG Alberto Sucasas- el descontento de los compañeros que sí se examinaron era notable. «Una amiga tenía que irse de viaje esa tarde». Con respecto al examen de Lengua Castellana, criticado por algunos alumnos por su excesiva dificultad, ella dice que «fue más difícil el de Gallego, sobre todo el comentario de texto. Sin embargo, fue donde saqué mi mejor nota. Al final importa mucho quién te corrija», reflexiona.

Con respecto al calendario de exámenes que se estrena este año, Cristina se muestra encantada. «Para mí es mucho mejor porque luego me queda el resto del verano para descansar», explica. «Además, no me importa tener menos tiempo porque así lo tengo más fresco», afirma. Y añade que, por culpa de la presión, «si el examen fuese en septiembre, me pasaría todas las vacaciones de verano estudiando».

A menos de una semana del comienzo de las pruebas, reconoce estar esforzándose lo máximo posible. «Esta semana no he salido de fiesta», dice, aunque reconoce que suele ir a tomar algo con sus amigos después de cenar. «Eso sí, a las 12 estoy en casa», señala. Dice, además, que ha cambiado sus horarios . «Ahora estudio 3 horas por la mañana y 3 por la tarde. He aprendido que las noches son para dormir».