Empresa y sindicatos constituirán a partir de ahora las comisiones que definirán el número de trabajadores que saldrán este año y las nuevas contrataciones
07 feb 2019 . Actualizado a las 13:50 h.Desde finales del pasado año, cuando se aprobó el plan estratégico de Navantia, todo son cábalas en los astilleros de la compañía sobre la repercusión exacta de este programa sobre el empleo. Una de las principales consecuencias del plan de futuro es la salida anticipada de 2.200 personas de la plantilla, es decir, todos aquellos que al menos tengan cumplidos 61 años. En contrapartida por ese adelgazamiento del censo de empleados, la empresa que preside Susana de Sarriá contratará 1.658 nuevos trabajadores. En la ría ferrolana está previsto que en los cuatro años de duración del plan sean prejubilados unos 900 trabajadores y contratados, alrededor de 700. Sin embargo, esas no son cifras oficiales, sino estimaciones, ya que, según afirman tanto la dirección de la compañía como los representantes de las centrales, serán las comisiones que se creen a partir de ahora las encargadas de llevar a cabo ese trabajo de definición, así como también de los perfiles de los futuros empleados.
El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica hoy el primer convenio colectivo único para todos los astilleros públicos, que tendrá vigencia hasta el 2021. Este trámite abre oficialmente esa fase que tanta expectación genera dentro y fuera de los muros y verjas de ambas factorías de la ría. A partir de ahora será la dirección de Recursos Humanos la que tenga que convocar a los sindicatos -que en las últimas semanas han elevado sus propuestas sobre los miembros que pasarán a formar parte de las comisiones- para constituir, en primer término, el comité intercentros, y posteriormente el resto de los grupos de trabajo.
Sobre la mesa, el principal gran objetivo a lograr es el desarrollo del expediente de despido colectivo por el que saldrán anticipadamente aquellos que cuenten con 61 años. Para los mayores de 64 años, que también serán jubilados, se establecerán otras fórmulas.
La empresa confirma que tanto las primeras prejubilaciones como las incorporaciones -que se llevarán a cabo de forma escalonada en los próximos cuatro años- se efectuarán antes de que termine este mismo año. Dirección y sindicatos también tendrán que negociar el perfil de los empleos que necesita para cada centro, ya que si bien los responsables de la compañía pública insisten en los últimos años en la necesidad de contar con más técnicos, las centrales no quieren que la mano de obra pierda peso.
La comisión de Política Salarial también tiene peso, debido a la actualización de las nóminas recogidas en este convenio, que unifica las condiciones de todos los trabajadores, procedan de la antigua rama militar o de la civil.