La buena salud de la medicina estética en Ferrol y Narón

Álvaro Alonso Filgueira
ÁLVARO ALONSO FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

CESAR TOIMIL

Las clínicas de la zona, que ponen el bótox al lado de casa, suman clientes que mejoran su aspecto

09 ene 2019 . Actualizado a las 10:25 h.

Como quien va al médico o al dentista, cada vez más ferrolanos y naroneses, y otros vecinos de la zona, se animan con los tratamientos de medicina estética. Es decir, nada que ver con el bisturí y sin recuperación posterior, con el fin de mejorar su aspecto. «A pesar de lo que pueda parecer, la medicina estética goza de muy buena salud en Ferrol», expresa Carmen Fernández, doctora de la Clínica Ferreras, en el Cantón, y vicepresidenta de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME). De hecho, los pacientes de la zona «están bien informados y saben muy bien lo que pueden esperar». Mientras hace unos años «estaban acostumbrados a desplazarse a Madrid o a Barcelona, en este momento no lo necesitan». Son, la mayoría, «usuarios habituales».

Lo mismo opina Beatriz Mosquera, con consulta en Canido, que cree que «poco a poco la gente se hace más tratamientos cerca de donde reside en vez de ir, por ejemplo, a A Coruña». Aunque la ciudad herculina fue «más prematura», en esta zona «siguen creciendo los centros de medicina estética». Por su parte, Miguel Lamas, director del grupo médico estético Kocoa, con clínica en Narón, dice que existe «un servicio de calidad con precios accesibles para todos».

CESAR TOIMIL

En medio de este «auge» de medicina estética, Carmen Fernández recibe en torno a una veintena de pacientes cada jornada que consulta en Ferrol -también está en A Coruña-. La toxina, llamada popularmente bótox, es el tratamiento más solicitado «por su efectividad» y tiene unos resultados «muy satisfactorios». Asimismo, los rellenos de arrugas con ácido hialurónico o los regeneradores de colágeno. De alguno de estos tipos, la doctora Mosquera realiza en torno a dos o tres al día, unos 150 al año.

«El concepto de parecer más jóvenes está obsoleto. Lo que intentamos es, con la edad que tenemos, mantenernos bien. Ahora el deseo es tener mejor aspecto. De esta manera, mejoramos los gestos de mal humor, tensión, cansancio, tristeza, los que tiene que ver con un sentimiento», explica Fernández. Añade Lamas que el tratamiento «estrella» de las mujeres en sus clínicas es el aumento de labios, dado su «efecto inmediato y que su precio acostumbra estar alrededor de los 300 euros».

Los más jóvenes, veinteañeros, consultan sobre todo por manchas o acné, aunque también solicitan un modelado labial. Por encima de los 40 es donde aparece el cliente más habitual, normalmente una persona con empleo que quiere mantener su aspecto. «El rango de edad oscila entre los 25 y los 50 años de edad, tanto hombres como mujeres, desde una dependienta o un mozo de almacén hasta una abogada», explica Lamas.

También para hombres

Normalmente es una mujer, pero los tratamientos a hombres ya representan alrededor de un 30 %. «Es un mito que la medicina estética no vaya con ellos. Además, es un cliente muy fiel, que y tiene muy claro lo que quiere conseguir», valora la doctora de la Clínica Ferreras. Sobre esto, el responsable de Kocoa detalla que piden, sobre todo, «minimizar el aspecto cansado de la mirada y corregir arrugas de expresión, tanto de la zona de la frente como las llamadas patas de gallo».

JOSE PARDO

Los precios, ahora, son «muchísimo mejores», que cuando empezó Fernández, hace treinta años. «Son asequibles a cualquier bolsillo y hay clientes de todo tipo, no solo aquellos que trabajan de cara al público. Quieren estar bien para ellos mismos, y punto» ¿Por qué? «Principalmente, porque ha crecido mucho, de manera que hay un arsenal más grande para trabajar y también más competencia entre laboratorios. Además, esa demanda ha mejorado la investigación», comenta. Sobre esto, la doctora Mosquera añade que «sí que es más accesible que hace años porque hay más clínicas, mejores precios y más formación». «Antes estaba, se podría decir, mal visto -continúa- y se intentaba ocultar. Ahora, en cambio, la gente presume de ello, sobre todo en su entorno más cercano».

Una clienta de 94 años

Y, más que de anécdotas, la doctora Fernández habla de una clienta «especial»: una ferrolana de 94 años que «se sigue poniendo sus rellenos, está estupenda y te contagia su alegría de vivir». Mientras, la doctora Mosquera confirma que lo «a veces tienen peticiones estridentes», trabajos que rechaza «en la mayoría de los casos». Entre sus novedades, están promoviendo sobre todo las técnicas antiedad. Asimismo, tratan alopecia y hace poco han empezado con los trasplantes capilares.

«La medicina estética sigue en constante evolución gracias al descubrimiento de nuevos tratamientos, técnicas y productos. Y las personas cada vez nos preocupamos más de nuestra imagen y salud», concluye Lamas