Ferrol y Oleiros son los concellos de la provincia con menos puntos de luz

La Voz SANTIAGO

FERROL CIUDAD

CÉSAR TOIMIL

Una encuesta de la Diputación revela que Coruña, Santiago y Noia destacan entre los municipios mejor iluminados

07 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Noia es el municipio mejor iluminado de la provincia entre los de mayor población. En puntos de luz por habitante solo lo supera Ordes, y en el número de farolas en relación a la superficie de sus núcleos (hectáreas) se sitúa a rebufo de A Coruña. Estos datos figuran en la encuesta sobre infraestructuras y equipamientos locales elaborada por la Diputación de A Coruña, un documento que aporta datos significativos sobre el alumbrado público entre las tres principales ciudades. Así, mientras A Coruña y Santiago destacan entre los municipios mejor iluminados, Ferrol aparece a la cola. Comparte con Oleiros la condición del concello con menor número de puntos de luz por habitante (0,02) y su promedio por superficie de los núcleos (0,87 por hectárea) solo lo empeoran Oleiros (0,54), Teo (0,65) y Carballo (0,82), siempre de acuerdo con los datos del referido estudio de la Diputación.

Si Noia es el que sale mejor parado de ese análisis, Oleiros es el peor entre los catorce ayuntamientos analizados, que se corresponden con los más poblados. Los datos de ese trabajo también evidencian que muchos municipios con censos inferiores mejoran en la dotación de alumbrado público a otros con más vecinos. Los cinco con mayor número de puntos de luz por habitante son Ordes (0,34), Noia (0,23), Ribeira (0,13), Sada (0,13) y Santiago (0,12). En esa ratio, los cinco con menor equipamiento lumínico son Oleiros (0,02), Ferrol (0,02), Carballo (0,04), Teo (0,05) y A Coruña (0,06). En cuanto al número de puntos de luz en relación a la superficie de sus núcleos de población, los cinco mejor iluminados son A Coruña (5,91 farolas por hectárea habitada), Noia (4,99), Santiago (3,49), Ordes (3,19) y Arteixo (3,07). Y los cinco peores en ese concepto son Oleiros (0,54), Teo (0,65), Carballo (0,82), Ferrol (0,87) y Boiro (1,38).

En una franja intermedia se sitúan municipios como Ribeira (2,25 puntos de alumbrado público por hectárea de núcleo habitado), Sada (1,87), Narón (1,57) y Ames (1,54). 

Ahorro energético

Al margen del número de farolas hay aspectos cualitativos que el estudio, lógicamente, no mide, pero en el que los ayuntamientos han avanzado durante los últimos años. Es el caso de la eficiencia energética, propiciada por la creciente tendencia de los municipios a reemplazar las luminarias tradicionales por otras de tipo led, que consumen y contaminan menos y que alumbran más. A esa estrategia de reducción de la factura energética de los concellos contribuyó la línea de ayudas que en el 2016 convocó el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE). En el caso de Santiago, ese programa ha permitido sustituir 2.500 lámparas, con un ahorro que el Concello calcula en 240.000 euros anuales. Este aspecto no es baladí para un Ayuntamiento con una factura de alumbrado público que ronda los 15 millones al año.