Diego Rivas, el seguro de vida del Racing bajo los tres palos

JOSE VALENCIA FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

José Manuel Ferreiro

El portero destaca el gran trabajo defensivo, aunque en lo personal es exigente y confía en poder aportar todavía más cosas al equipo

08 ene 2019 . Actualizado a las 09:38 h.

El Racing, con 13 goles encajados, es el segundo equipo de Tercera que menos tantos ha recibido. Tan solo el UD Ourense de Fernando Currás, con uno menos, mejora estos números. De estos trece tantos, once llegaron en las primeras siete jornadas de liga. En los once últimos encuentros, en los que el Racing no ha perdido, solo le han hecho dos tantos. El mérito de estas cifras es de todo el equipo, aunque también del portero Diego Rivas, un seguro de vida bajos los palos de la portería racinguista. Como el resto del equipo, Diego tuvo sus altibajos, algunas dudas en el arranque de la competición, aunque ya ha comenzado a demostrar lo gran portero que es. Diego Rivas habló ayer de la actualidad racinguista: «Los días de descanso nos han venido bien ?explica? pero es cierto que han llegado en nuestro mejor momento. Han sido trece días de parón, algo más de lo normal, aunque seguro que no afectará a nuestro rendimiento».

Sobre la vuelta a la competición frente al Ribadumia, espera un partido complicado: «Será como los últimos encuentros en casa ?destaca? nosotros tendremos que llevar la iniciativa y demostrar, desde el primer minuto que somos el equipo que quiere ganar. Hay que defender bien y trabajar duro para que ellos no se metan en el encuentro. El míster todavía no nos habló mucho de ellos, lo hará hoy o mañana. De momento, estamos centrados en el trabajo físico».

El portero no le da demasiada importancia a que el domingo llegará la primera oportunidad de situarse de líderes de la categoría, en el caso de que el Racing gane al Ribadumia y el Bergantiños no venza en el campo del Alondras: «Lo de ponerte líder estaría muy bien, aunque lo que realmente vale es ser líder en mayo, cuando finalice la competición. La liga es una carrera de fondo y nos ha costado mucho llegar a esta situación. No se puede ser campeón antes de mayo. Lo importante es que mantengamos el buen juego que hacíamos antes del parón, si lo conseguimos, las posibilidades de lograr el título serán grandes».

Valora de forma especial los siete triunfos logrados de forma consecutiva: «Necesitábamos una racha de triunfos y llegó. No es fácil ganar siete partidos seguidos, sea la categoría que sea».

Sólidos y fiables

Implicado directamente en la defensa, valora como especialmente decisivo el trabajo del equipo en este sentido: «Era un punto a mejorar, ya que concedíamos demasiados goles. Teníamos que ser sólidos, fiables. Jugar más juntos y saber en dónde y cuándo apretar. Creo que todo formó parte del acoplamiento del equipo. El trabajo defensivo es de todos, aunque para un portero acabar con la portería a cero es un orgullo. Lo importante es que gane el equipo, aunque para nosotros no es lo mismo ganar por 4-0 que por 4-1. Si dejas tu portería a cero, es una felicidad extra que obtienes».

Hay partidos en los que no toca mucho el balón, el trabajo defensivo del equipo es impecable, aunque Diego destaca que es una responsabilidad extra: «Tus paradas se convierten en intervenciones decisivas. Si te llegan una o dos veces y te hacen un gol, estás muerto. Lo ideal para un portero es participar en el juego. Yo habló seguido con los defensas y así estos siempre muy metido en el encuentro».

A nivel personal está contento, asegura que se encuentra en un gran momento, aunque destaca que es exigente y asegura que confía en aportar algo más al equipo.

El jugador está contento en el Racing y orgulloso de formar parte de un gran proyecto: «Cuando decidí venir al Racing sabía que daba un paso atrás en mi carrera deportiva, ya que era regresar a Tercera. Sin embargo, lo entendí como un paso atrás para después dar dos o tres hacia delante. No era fácil volver a casa en la situación en la que regresé y comenzar una liga con la obligación de ganar todos los partidos. Sin embargo, estoy muy contento. Este nuevo proyecto del Racing es ambicioso, aunque es muy bueno. Ahora sé que estoy en donde tengo que estar. Lo cierto es que jugar con el primer equipo del Racing, siempre fue una espina clavada en el corazón, algo que nunca antes había podido hacer. Volví en el momento justo y estoy satisfecho de poder ayudar. Todo el mundo en el vestuario está muy implicado en este proyecto».

Diego Rivas no se ha perdido ni un minuto en los 18 primeros encuentros de liga, lo que significa que su compañero Chema no ha debutado: «Es duro, aunque el fútbol es así. Yo trato de ayudarlo en todo lo que puedo, él es tan importante como el resto de nosotros. Yo también me he encontrado en su situación, nos suele pasar a todos en algún momento. Él es joven, tiene mucho talento y seguro que tendrá oportunidades de demostrarlo. Su capacidad futbolística está fuera de toda duda, seguro que si el míster decide que juegue, así lo demostrará».

Por último, Diego Rivas ve con buenos ojos la llegada de refuerzos a la plantilla racinguista: «La parte bonita de ser pocos es que juegas mucho, aunque también sabemos que la competición es larga y exigente. Cualquier inconveniente que pasara ahora, nos complicaría la vida. Todos tendremos que dar el máximo para llegar a buen puerto. En el vestuario todos vemos con buenos ojos que llegue gente a ayudarnos».