El dique cubierto de Ferrol sigue en el debe

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Navantia aún no consignó los fondos para remodelar su factoría y poder fabricar así más rápido y barato

23 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que comenzó a negociar el plan industrial, Navantia no ha dejado de insistir en que su transformación hacia el Astillero 4.0 es un camino sin retorno. En Ferrol, este proceso de modernización pasa por acometer un ambicioso proyecto para la remodelación de las instalaciones que implica dejar de construir en la grada, como hasta ahora, para hacerlo en un dique cubierto. El astillero empezó a mover la compleja maquinaria burocrática para acometer esta actuación a finales del 2016. Dos años después aún queda mucho camino por recorrer para materializarlo. De hecho, el diputado ferrolano del Partido Popular Juan Juncal ha presentado una iniciativa en el Parlamento para instar al Gobierno a que se acometa de manera urgente este proyecto, al advertir que en los 400 millones de euros que tiene previsto invertir Navantia en los próximos cuatro años, no se incluyen fondos para esta iniciativa, y solo al dique cubierto habrá que destinar alrededor de 140 millones de euros.

El proyecto se sustentará en la construcción de esa infraestructura, de 360 metros de largo por 65 de ancho, que estará ubicada dentro de una nave que dispondrá de espacios también para llevar a cabo operaciones de premontaje de estructuras. Además, se construirán tres nuevos muelles, que tendrán 273, 200 y 350 metros, con calados de diez metros. El proyecto implicará la ocupación de una lámina de agua de más de 70.000 metros cuadrados, por lo que los rellenos que va a producir serán destacados.

La tramitación ambiental se desarrolla desde diciembre del 2017, y paralelamente, Navantia adjudicó a la empresa Proyfe la asistencia técnica para el impulso del Astillero 4.0., con un plazo de ejecución de un año y medio, así que hasta junio del próximo ejercicio se mantendrá esta ayuda.

Navantia siempre ha manifestado su intención de ligar la materialización de este proyecto a la construcción de las cinco fragatas F-110 para la Armada española, que acaban de ser autorizadas por el Gobierno central. Sin embargo, y aunque la primera unidad de la serie no se iniciará al menos hasta el 2020, ya no podrá construirse en el dique cubierto y, tampoco está claro que ni siquiera la última.

No obstante, la apuesta del Astillero 4.0 sin la concreción de esta revolución de las infraestructuras en Ferrol estaría coja. Navantia ha defendido que con este modelo construirá los barcos más rápido y a un menor coste. Por ahora, el proyecto continúa en el debe.