Las llegadas de la F-101, el Cantabria y el Serviola completarán los amarres castrenses
17 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El pasado martes, el buque de aprovisionamiento en combate (BAC) Cantabria, se despidió de la fragata neerlandesa De Ruyter, líder en este momento de la SNMG-2. El buque finalizó así dos meses en el mar integrado en la Agrupación Naval Permanente número 2 de la OTAN. Y una vez ejecutado este papel esencial en la flota de la Alianza, puso rumbo a casa. Su llegada está prevista alrededor de las diez de la mañana de este lunes en un muelle del astillero de Navantia.
El jueves, el Cantabria hizo la última escala del despliegue en la capital portuguesa, Lisboa, siempre alerta como parte del Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa. Además, el sábado se dio la casualidad que durante la navegación por el Atlántico hacia Ferrol encontró al buque escuela Juan Sebastián de Elcano, que en este momento está en la cuenta atrás para un nuevo crucero de instrucción.
Y otro barco con base en el Arsenal que está a punto de atracar aquí es el patrullero Serviola. El 5 de diciembre partió de su base para realizar cooperación bilateral con la Marina argelina. En el puerto de Argel, la capital, la dotación llevó a cabo, por ejemplo, un adiestramiento en operaciones de interdicción marítima con una unidad de operaciones especiales de la Armada del país africano. Asimismo, recibió la visita de oficiales argelinos y del embajador de España allí, Fernando Morán Calvo-Sotelo.
La tercera unidad que se encuentra en el exterior, pero que también regresa esta semana, es la fragata Álvaro de Bazán (F-101). Desde el 8 de diciembre formó parte de los ejercicios Eagle Eye 18-04, para la integración de todas las capacidades del Sistema de Defensa Aérea Nacional, en los que participaron los ejércitos de mar, tierra y aire.
Aprovechando estas maniobras, un grupo de guardiamarinas de 1.º de la Escuela Naval Militar embarcaron y se integraron a bordo de la fragata durante la escala que hizo en el puerto de Cartagena. Asimismo, en el muelle de Cruceros de la ciudad murciana se llevaron a cabo ayer y el sábado unas jornadas de puertas abiertas, en las cuales se realizaron recorridos guiados y hubo visitas de políticos locales.
Por otro lado, tras finalizar su Período de Inmovilización Programada (PIP), la Blas de Lezo realizó una breve salida que sirvió como bautismo para los aspirantes de los Cuerpos Comunes que se encuentran realizando su formación en la Escuela Naval. Mientras, la Almirante Juan de Borbón está en aguas cercanas.
Y con la Cristóbal Colón y el Centinela recién llegados, el Arsenal, como es habitual, estará abarrotado por Navidad. Después de estas fechas la Méndez Núñez será de las primeras en salir, con destino a Estados Unidos.
Juan Carlos Pérez Guerrero toma el mando de la Blas de Lezo
El final de este año también es sinónimo de cambios al frente de algunos buques con base en Ferrol. Esta semana se celebró a bordo de la fragata Blas de Lezo la ceremonia de relevo de mando, en la que el capitán de fragata Vicente Rubio Bolívar entregó la dirección de la F-103 al capitán de fragata Juan Carlos Pérez Guerrero. El acto fue intervenido por el comandante de la 31 Escuadrilla de Superficie, Gonzalo Villar. «Enhorabuena al comandante saliente y mucha suerte al nuevo en su mando», expresaron desde la Armada.
En los próximos días también está previsto el cese de Fernando García Tobío (Centinela) y de José María Fernández de la Puente Millán (Cantabria), que serán relevados, respectivamente, por Iván Ron Serrano y Juan Pablo Díaz-Pache Mackinlay.