Expertos en arquitectura y arte valoran el paso del rojo inglés al gris, porque entender que se integra mejor en el entorno
23 nov 2018 . Actualizado a las 19:49 h.Abanca está realizando una profunda reforma interior y exterior del emblemático edificio de la plaza de España, el de la torre del reloj, y ya es perceptible el cambio de color de la fachada, que pasa del granate o rojo inglés al gris. Expertos en arquitectura y arte analizaron esta mañana en RadioVoz el cambio que experimentará la fachada de entrada a la ciudad desde la carretera de Castilla, llegando a la conclusión de que se trata de una medida adecuada, porque favorece una mejor integración del edificio con los de su entorno. En el programa que conduce Isidoro Valerio participaron los arquitectos Santiago González y José Romero, la licenciada en Arte Pilar Freire, el pintor Anxo Varela y el presidente de la Asociación de Vecinos A Magdalena, Luis Taboada. Salvo este último, que manifestó que le gustaba más el color rojo inglés que lucía hasta ahora, opinión que también expresaron la mayoría de los oyentes de RadioVoz, todos los demás contertulios se posicionaron a favor del cambio a gris y blanco.
Al hilo de este cambio, se abordó el cromatismo del conjunto de la ciudad, llegando a la conclusión de que hay edificios que son un ejemplo del buen hacer en sus rehabilitaciones, porque, según los expertos, lo importante es que el color elegido para las fachadas se ajuste a la geometría y la arquitectura de los inmuebles. Así, se destacó el acierto en el caso del Teatro Jofre, la Casa Romero, la Casa Antón, el Ateneo y el Hotel Suizo y se cuestionó el color naranja del Casino Ferrolano, así como el abandono de otro edificio emblemático de Ferrol, el de Aduanas del puerto, o del solar existente en una esquina de la plaza de Amboage.
Los profesionales valoraron la importancia de la Guía de colores que acaba de sacar la Xunta de Galicia, que, sin ser de obligado cumplimiento, sirve de base para la búsqueda de un cromatismo de conjunto. En esta línea, pusieron de manifiesto que en la actualidad, entre los requisitos exigidos para las licencias de rehabilitación figura el de hacer una cata de las fachadas para tratar de llegar al color original del edificio.
En opinión de los contertulios, lo que resulta más «desagradable» desde el punto vista estético son los edificios de los años setenta con fachadas de gresite y pequeños azulejos. En opinión de la licenciada en Arte Pilar Freire, «suponen un bofetón a la vista, sobre todo si están entre galerías».