La alianza entre las vacunas y las citologías centran la Charla saludable del cáncer de útero

Bea Abelairas
Bea abelairas FERROL

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Dos especialistas del CHUF explicaron que van de la mano en el sistema preventivo

15 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Charla saludable de ayer llenó el auditorio de Afundación de un público mayoritariamente femenino y muy interesado en conocer cómo prevenir el cáncer de útero, aunque las dos ginecólogas del Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (CHUF) hicieron referencia a otros tumores. Esta ponencia forma parte de un ciclo que organiza La Voz y el área sanitaria y que tiene como objetivo difundir en buenos hábitos de vida. Ayer se incidió especialmente en dos: la vacuna contra el virus del papiloma humano y la prevención mediante los programas de cribado, que consiste en una citología cada tres años para mujeres sin síntomas.

Las dos ponentes forman parte de la Unidad de Patología Cervical y Colposcopia y en el área de Ginecología Oncológica. La especialista Raquel Abelleira inició la charla con un recuerdo a sus compañeras de equipo y se centró en la prevención en mujeres adultas e incluso ya afectadas por el virus del papiloma humano. «Para llegar al cáncer una condición imprescindible es la persistencia de la infección durante años, décadas en general, aunque hay que recordar que un factor favorecedor de esa persistencia es, entre otros, el tabaco».

No obstante, Abelleira explicó que no todos los cánceres de útero tienen el mismo origen, aunque para todos hay una prueba infalible a la hora de detectarlas: «Estas lesiones son el objetivo de la citología cervical, con la citología vamos a seleccionar las mujeres de la población que tienen un cérvix sano y las que tienen una alteración cervical para después realizar su estudio y tratarlas si lo necesitan». En este punto dio un dato que pone como imprescindible solicitar la citología a las matronas de los centros de salud: «El 45 % de las mujeres que han tenido un cáncer de útero no se hacían una citología, así que si tienen a una amiga en esta situación hagan algo por ella y recuérdenselo».

Y sobre todo destacó la importancia de realizar esta prueba a partir de los 26 y hasta los 60 años: «Las sociedades científicas indican el cribado en mujeres, sin síntomas, cada tres años es eficaz», precisó y dio a conocer técnicas de cribado con test de VPH de alto riesgo del que pronto habrá novedades. Otro aspecto que destacó radica en que no hay campañas en las que el Sergas llame a las mujeres a realizar esta prueba, como sucede en otros tumores, sino que deben ser ellas las que pidan el examen cada tres años.

La otra especialista, María Áurea Calaza, dio a conocer los tres tipos de vacunas incluso desde su origen: «La creación de una vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) surge debido al gran problema de salud pública que supone este virus, ya que es la enfermedad infecciosa de transmisión sexual más frecuente». Normalmente las personas que se infectan se curan sin percatarse de la dolencia, pero en otros casos este puede ser germen del cáncer. «También es el responsable del 90 % de los anales, y un porcentaje importante de cáncer de vagina, pene, vulva y los cánceres localizados en la boca y la faringe». Aunque esta especialista desveló que la buena noticia es que se ha comprobado que la vacuna es efectiva para prevenir estos tumores, motivo por el que se recomienda que se vacunen a niños, además de a las niñas que tienen el antídoto incluido en su calendario de vacunación.

La ginecóloga del CHUF recalcó que las vacunas son seguras y preventivas, «no sirven como tratamiento sobre la infección ya establecida, ni sobre las posibles lesiones secundarias a la misma, aunque tienen un papel importante y son muy eficaces ante una reactivación o reinfección del virus».