Jorge Llorca: «Estoy encantado de volver a casa»

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Tras catorce años sin exponer en Ferrol, el artista regresa a su ciudad natal para exhibir Retrospectiva, «la expresión de toda una vida dedicada a la plástica»

14 nov 2018 . Actualizado a las 18:39 h.

Como le pasa a una madre con sus hijos, a Jorge Llorca (Ferrol 1952) se le hace difícil -por no decir imposible- quedarse con un determinado período de su dilatada trayectoria pictórica. «Cada etapa tiene sus exigencias y todas tienen un valor especial para mí», comenta sin excluir a ninguna de sus criaturas artísticas.

Por eso, el contar con obras representativas de cada una de sus etapas fue uno de los principales objetivos que se marcó a la hora de montar Retrospectiva, una muestra que es «la expresión de toda una vida dedicada a la plástica» y a través de la cual -incluye nada más y nada menos que 114 obras- se puede repasar la evolución del artista ferrolano desde sus tiempos de estudiante de Bellas Artes hasta la época actual.

Esta nueva propuesta expositiva aterrizó el pasado viernes en el Centro Torrente Ballester (CTB) y, desde entonces, Llorca vive en un estado casi eufórico. «¡Es que esta muestra es muy especial para mí! En primer lugar, porque supone mi regreso a Ferrol después de catorce años sin exponer aquí, y además, porque se trata de una muestra muy completa, que reúne obras de todas mis etapas, incluso algunas de las que ya ni siquiera me acordaba», comenta complacido el artista.

Llorca reconoce que montar Retrospectiva no fue una tarea sencilla, porque había mucha obra antigua que ya no tenía localizada, pero, afortunadamente, el «boca a boca hizo mucho» y todos los propietarios -tanto particulares como instituciones- se mostraron dispuestos a colaborar desde el principio.

Así, tirando de aquí y de allá, el artista consiguió montar una ingente exposición que no solo reúne obras de todas las épocas, sino también de formatos y técnicas muy variadas. «Yo nunca me quise especializar en ninguna técnica en concreto y por eso en mi trayectoria se puede encontrar de todo: óleos, acrílicos, acuarelas, técnicas mixtas...», detalla el artista.

Además, Retrospectiva depara muchas sorpresas para aquellos que solo conozcan al Llorca más maduro. Y así, junto a su obra más expresionista o la más exquisita de finales de la década de los noventa y principios del siglo XXI -por la que tal vez es más conocido-, el visitante puede toparse con creaciones «curiosas» y menos populares, como muchos dibujos, los carteles que pintó para distintos grupos progresistas de Ferrol o el proyecto del mural de la piscina municipal de Caranza.

Los ferrolanos que ya han visitado la muestra no dejan de felicitarle. Y él, reconfortado al comprobar que sus obras «aguantan bien el paso del tiempo», no puede sino corresponderles: «Estoy encantado de volver a casa».

EN CORTO

Dónde. La muestra se puede visitar en el  Centro Cultural Torrente Ballester, en la calle Concepción Arenal, donde Llorca ya expuso otra retrospectiva hace 14 años.

Cuándo. «Retrospectiva» se puede visitar hasta el 31 de diciembre.

Retrospectiva de Llorca 

Eduardo Fra Molinero

Cruzas o patio e escoitas na claraboia o golpe intenso da choiva do Norte. Choiva inmensa. Nada hai que te entreteña neste patio esencial a non ser que penses que a xeometría tamén é unha solución. E pasas aos espazos de luz e alí están outras xeometrías, soños e arelas ditas coa gramática das masas de cor e das liñas puras tiradas con pulso de ourive. Como Llorca é pintor e máis escritor busco en dous sitios os rexistros da súa visión do mundo. Na pintura atopo intimidades, silencio, contemplación, oración mental coa natureza ou mesmo cos obxectos simples mínimos que os humanos dicimos as nosas cosas. É un lirismo que serve para compensar o moito que nos frustran as realidades sociais. O barro contaminado co que estamos feitos. Na literatura usa doutras estratexias. Fai bromas, xoga con ironías, sátiras e até tomaduras de pelo. A pintura é para o misterio existencial e non quere dispersión. «Hay un tiempo para la oración e otro tiempo para las perdices escabechadas» dicía a Santa.

Esta retrospectiva é a meditación de media vida. Tamén liberación de mitoloxías, algunhas delas privadas. Soños de beleza, admiración da grandeza da noite, da perfección dos animais, dunha simple cunca, folla ou figura humana simplificada en mancha... A contemplación e a meditación e unha forma de estar no mundo.

Como ando coa vista averiada non dei alcanzado a ver toda a obra polo miúdo, pero tirei da memoria e logo recoñecín a Jorge Llorca andando o seu camiño de perfección.