La VAP, la carretera del eterno retraso

ANA F. CUBA, A.U. ORTIGUEIRA / LA VOZ

FERROL CIUDAD

CÉSAR TOIMIL

La Xunta sigue sin apostar por la principal vía de comunicación de la comarca de Ortegal, con solo 1,5 millones en el presupuesto de 2019, para la variante de Viveiro

27 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si hasta 2017 las obras de la Vía de Altas Prestacións (VAP) Costa Norte, de Ferrol a San Cibrao, avanzaban a casi un kilómetro por año, con 16,3 kilómetros ejecutados en 17 años, la media ya se ha reducido y quedan por abrir 94 kilómetros. La VAP, comprometida por la Xunta para «compensar» el desvío de la Transcantábrica hacia Vilalba a principios de este siglo, se convirtió hace tiempo en la carretera del eterno retraso. El Gobierno gallego sigue sin apostar por la principal vía de comunicación de la comarca de Ortegal, con solo 1,5 millones en el presupuesto de 2019, para la variante de Viveiro.

El plazo para redactar el proyecto de mejora de la AC 862 vencerá a finales del año 2019

El alcalde de Cariño, el socialista José Miguel Alonso Pumar, demandó esta misma semana «un impulso por parte da Xunta ao proxecto da VAP Costa Norte» y recordó que en el presupuesto de 2019 la Consellería de Infraestruturas consigna para este vía «só 1,5 millóns de euros, cando falamos dun proxecto de 400, moi importante para que as industrias das provincias de A Coruña e Lugo sexan competitivas na mobilidade de mercancías». A su homóloga de Moeche, la nacionalista Beatriz Bascoy, le parece «impresentable». «Podemos entender que os cartos dan para o que dan, pero está claro que esta comarca non é unha prioridade», evidencia.

El regidor de Mañón, el popular Alfonso Balseiro, cree que «xa vai sendo hora» de contar con una carretera del siglo XXI y, pese a la escasísima inversión prevista para el año que viene, se muestra confiado en que la Xunta atienda las necesidades de la comarca «ao longo dos próximos catro anos». ¿Se convertirá Ortegal algún día en la prioridad? «Tocar hanos tocar», vaticina.

El aislamiento de la zona

Menos esperanzados sobre el futuro de esta infraestructura se sienten los empresarios de la zona. «Es gravísimo y nos está perjudicando muchísimo no tener una carretera en condiciones; a la gente le gusta esto y quiere venir, pero se encuentra con unas vías pésimas. Y eso, unido a la situación del tren [ni siquiera hay quien cobre el billete y hay viajeros que van más días en taxi que en tren] y el transporte público por carretera, sin apenas autobuses, demuestra una dejadez total», denuncia Santiago Villasuso, hostelero de Ortigueira. «Es un sitio magnífico para vivir y sería el paraíso si de aquí a Ferrol tardaras media hora en coche [...]. Tenemos una población muy mayor, que tiene que ir al médico y al hospital a golpe de taxi, encima con pensiones bajas. Es como si estuvieran aislando al enemigo, ya solo nos falta que nos corten la luz y el agua; es muy grave, basta con ver los establecimientos que cierran», enfatiza.

Empresarios y alcaldes urgen a apostar por una comarca que pierde empleo y población

Los repartidores soportan a diario este problema. «Hago la ruta de Miño a Estaca de Bares y [el estado de la carretera] hace que vayamos siempre con mucho retraso, no puedes adelantar en tramos largos y nunca vas a la velocidad que tienes que ir porque si no no llegas y las tiendas cierran», señala Óscar Zamora, empleado de una empresa de mensajería urgente, que también sufre el trazado de la AC 566, entre Valdoviño y Cedeira, «terrible». «Reparto desde Ferrol a Mañón, hasta As Somozas, y es un problema», corrobora Nelson Chaparro, conductor de otra firma.

En cuanto a la mejora de la AC 862, para la que Infraestruturas anunció en marzo una inversión de diez millones de euros, el plazo para redactar el proyecto concluirá a finales de 2019. «É un parche -sentencia Bascoy-; con este nivel de investimentos a Xunta consegue que a renda per cápita dos concellos desta comarca sexa pequena e que o despoboamento vaia incrementándose. Evidencia que non cren nesta zona; xa está ben, sempre pasamos á lista de espera».