Las elecciones nos esperan y como habrá mucho que reflexionar ya aparecieron los primeros aspirantes. Rey Varela, por el Partido Popular, recibió varias visitas del presidente de la Xunta, aprovechó para contarnos lo felices que seríamos los ferrolanos si por las mañanas cuando levantamos la persiana viéramos una ciudad que no va y otra que puede ir mejor con Rey Varela al frente. Lo curioso es que vino en otras ocasiones a decirnos algo parecido y seguimos como entonces, arengándonos esta vez que teníamos que mirar más allá de nuestro propio ombligo y que nuestros políticos tienen en la cabeza un modelo puzle, pero que saldremos de esta con las inercias de Galicia, que van muy bien, y ahora con la experiencia de este candidato.
Lo más cierto es que desde la primera vez que vino Feijoo seguimos con el panorama político indoloro de gobiernos populares varios en Santiago y en Madrid -acaban de llegar los socialistas- y siendo secretario de Galicia del PP otro ferrolano de jalisco, llamado Santalla, que está en el Parlamento para morderle el tobillo a la oposición y repetir que siempre hubo un derroche de inversión, generosidad y entendimiento con los gobiernos populares. O sea, haciendo ruido en favor de parte, y mientras la gente sigue marchándose de esta su ciudad porque no tienen futuro en Ferrol. Así pues madrugó aquí la campaña. Partidos y asociaciones están ya engrasando máquinas y todo indica que el escenario político se va a presentar muy concurrido y habrá opiniones para todos los gustos. Como suelen decir algunos, en democracia quien no hace ruido no existe.
Una novedad que irrumpe con fuerza en la contienda es el Partido Socialista, y ya se conoce un candidato que estuvo en otra corporación llevando la responsabilidad de Urbanismo. Se trata del senador Ángel Mato, persona muy vinculada familiarmente a Ferrol y a este partido, y lleva la política progresista desde la moderación. Recoge una agrupación que no está en las mejores condiciones y desde la misérrima rendija de luz que queda, está dispuesto a aportar nuevas esperanzas y sacar de la parálisis actual a esta sociedad que se está ahorrando un precio que tendrá que pagar. Es un candidato que se asemeja a sus votantes y si gobierna evitará, seguro, que sigamos los ferrolanos autolesionándonos, podrá luz en aquello que cree y podremos salir todos más juntos de esta deprimente vulgaridad.