Portazo de los trabajadores al alcalde de Ferrol

J. C. M. FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

JACOBO AMENEIRO

Los empleados municipales retoman los encierros, tras abandonar la mesa de negociación denunciando incumplimientos y «ocultaciones» del gobierno local

17 oct 2018 . Actualizado a las 21:55 h.

«Menos buenas palabras y más hechos». En resumen, esto es lo que demandan los trabajadores municipales en el conflicto laboral que los enfrenta al gobierno de Suárez. Las llamadas al diálogo del alcalde ya no convencen a los representantes sindicales, al menos, no a todos. Y ayer, CSIF y UGT se levantaron de la mesa de negociación, tras leerle la cartilla al regidor, al que le reclaman que cumpla los acuerdos pendientes como paso previo a una negociación real. Un golpe en la mesa tras el que retomaban el simbólico encierro de 24 horas en la casa consistorial.

Tienda de campaña, esterillas, sacos de dormir y una enorme pancarta denunciando la inacción del gobierno local y la falta de compromiso con los trabajadores. Una semana después se repite la imagen. Y cuantos se acerquen esta mañana al Concello volverán a darse de bruces con un grupo de trabajadores municipales que protagonizan la protesta, secundada por CSIF, UGT y CIG por la política laboral del ejecutivo de izquierda rupturista de Ferrol. La acción se retomaba hoy, tras una mesa de negociación que el presidente de la Xunta de personal del Concello, Javier Sandá, no duda en tildar de «mero paripé».

«Non queremos que se nos acuse de non ter vontade negociadora; agora ben, tampouco vimos aquí a perder o tempo como noutras ocasións», rezaba el documento que CSIF y UGT leyeron en el arranque del encuentro con el que, «despois de más de catro meses sen ter ningún tipo de convocatoria, sen obter información, sen contestar ás nosas peticións, preténdese que nos sentemos a negociar o que o goberno quere».

Por ello, ambos sindicatos decidían abandonar el encuentro, que califican de «circo», no sin antes poner deberes al alcalde Jorge Suárez. Así, reclamaron una oferta de empleo para 2018 más ambiciosa -apunta Sandá que la propuesta municipal pasaba por crear solo dos puestos, cuando en febrero, por la tasa de reposición se cubrieron cuatro - «salvo que queira seguir precarizando os servizos públicos municipais».

Además, instaron al ejecutivo a «deixar de vulnerar o noso dereito á liberdade sindical», reclamando la entrega de la documentación precisa para poder valorar los temas, la convocatoria del comité de seguridad y salud para que, de una vez, se comiencen a tomar medidas en materia de prevención de riesgos y finalmente, «que empece por cumprir os acordos pendentes antes de traer novas propostas».

Reacción municipal

La respuesta del regidor no se hizo esperar. Y así, Suárez compareció ante los medios para insistir públicamente en su respeto por las movilizaciones y las reivindicaciones de los trabajadores e incidir en la necesidad de retomar el diálogo. En este punto, anotó avances en el cumplimiento de las reivindicaciones laborales -se refirió al próximo pago de las nocturnidades- y mostró su confianza en que «antes de final de mandato, podamos chegar a un acordo e o poidamos ter un remate mellor do que comezou».

Paradójicamente, pocas horas después convocaba una nueva mesa de negociación para el próximo miércoles, «con los mismos puntos y sin aportar documentación a mayores», tal y como denunciaba el jefe de la Xunta de Persoal, anticipando que, si no se producen novedades, la próxima semana se reeditará la situación vivida.