Empresas y sindicatos del naval sellan la paz con el pacto de mejora del sector

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL CIUDAD

PROPIAS

La patronal provincial del metal se pronuncia hoy sobre su inclusión en el convenio

17 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cinco empresarios y cuatro sindicatos escenificaron ayer la culminación de más de un año de negociaciones con la firma del acuerdo que regula las condiciones de trabajo en los astilleros de Navantia en la ría ferrolana. Es un pacto trascendente por cuanto no solo afecta a los trabajadores actuales -más de 2.000- sino a las plantillas futuras de las subcontratas. Si se cumplen las demandas y hoy la patronal provincial del metal acepta que ese pacto sea incluido como una disposición adicional del convenio, tendrá rango de ley y será de obligado cumplimiento para todas las empresas que quieran trabajar en la Navantia gallega.

Si la luz verde llega hoy, el acuerdo entrará en vigor el 1 de noviembre y las plantillas percibirán el 40 % de las nuevas actualizaciones salariales; el 1 de enero del próximo año pasarán a percibir ya el 70 % y, a finales de ese mismo ejercicio, el 100 %. Las mejoras también incluyen un plus diario que ronda los 900 euros anuales.

De nuevos, los empleados se dividen en dos categorías, los de aceros -con unos incrementos superiores- y los de pintura y servicios. Los pluses varían en función de si los trabajadores cuentan con la categoría de oficial de primera, segunda y tercera y especialistas.

Víctor Ledo, secretario de la Federación de Industria de CC.OO. de Galicia, subrayó que era un «acordo moi necesario para darlle estabilidade ao sector ante todo o que vai vir de carga de traballo» y añadió que demuestra que empresarios y sindicatos «vamos todos da man».

Vicente Vidal, de la Federación de Industria de la CIG, manifestó que el acuerdo, «que favorece ás dúas partes e evita a competencia desleal» pudo alcanzarse porque fue «froito da determinación que mostraron os traballadores, que nunca renunciaron a defender os acordos do 2001». María Palacios, de UGT, se felicitó por «la estabilidad» que ofrece la alianza para el sector y reclamó que la patronal provincial no ponga ninguna reticencia a su inclusión en el convenio para que puedan tener un marco legal.

Juan Novo, de MAS, se refirió a que con la firma del acuerdo, el de ayer fue «un día importante» para el sector, aunque manifestó su confianza en que la celebración pueda llegar hoy. 

Exigencia de Navantia

Carlos Gestido, director de la división naval y off-shore en Nervión, incidió en la importancia de que esa regulación, que aspiran a introducir en el convenio «sea de obligado cumplimiento para todos». Sin embargo, insistió en que el paso de verdadera trascendencia ha sido que Navantia haya accedido a exigir, en los concursos que vaya a lanzar a partir de ahora, «que las compañías que entren aquí tengan que cumplir como mínimo con los acuerdos del sector siderometalúrgico provincial».

Podrán así las firmas competir en igualdad de condiciones y evitarán las deslealtades que se dieron en los peores años de la crisis, cuando algunos empresarios tiraron los precios a base de recortar al máximo las condiciones de sus plantillas, expulsando del mercado a las compañías que sí estaban respetando los acuerdos que regulaban el sector.