Cinco incursiones de ladrones en viviendas y una farmacia en tan solo cuatro días han propiciado que las fuerzas de seguridad refuercen los operativos de vigilancia
20 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Los robos registrados en solo cuatro días en otras tantas viviendas además de en un negocio han reactivado la alerta en las fuerzas de seguridad, además de generar alarma entre la población. Con «modus operandi» distintos, lo que evidencia que se trata de grupos delictivos también diferenciados, los ladrones violentaron cinco propiedades privadas y se apoderaron de bienes ajenos, fundamentalmente dinero y joyas.
El primero de los robos se produjo sobre las 0.30 horas del pasado día 15 en la farmacia de Campolongo, en el municipio de Pontedeume. Los asaltantes accedieron al interior por una ventana lateral y se apropiaron de una caja que contenía dinero para el cambio y de una de las registradoras que había en la botica. Los hechos están siendo investigados por la Guardia Civil.
El lunes, día 17, por la mañana, los ladrones se cebaron con dos pisos colindantes de un edificio situado en la plaza de la Ilustración, en Ferrol, aprovechando que los dueños se habían ausentado para ir a trabajar. Tras forzar las puertas de ambas residencias, reventaron con una radial las cajas fuertes que el edificio ya tenía de obra en el interior de las habitaciones y se apropiaron de joyas y dinero en metálico, además de otros objetos de marca que encontraron por la casa. Una de las afectadas manifestó a este periódico que aún no habían calculado el importe de lo robado y que lo que más sentía era haber perdido algunas cosas por su valor sentimental.
La Policía Nacional de la Comisaría de Ferrol-Narón, que es la que investiga los hechos, sospecha que, por el modo de proceder, ambos robos son autoría de miembros de alguna banda extranjera que se desplazan desde otras localidades y vigilan las salidas de los dueños de las viviendas para ir a trabajar.
Al día siguiente, martes, día 18, otros amigos de los ajeno localizaron a una víctima en la parroquia naronesa de Sedes, ante la que se hicieron pasar por personal de una operadora eléctrica. Así, una pareja -hombre y mujer- abordó a un vecino del lugar de Lagüela, de 76 años, que en esos momentos estaba solo en casa, y mientras uno lo entretenía indicándole la posibilidad de reducir el recibo de la luz, el otro inspeccionó la casa y se apropió de 3.000 euros en metálico y varias joyas. Al percatarse de lo ocurrido, el afectado presentó una denuncia ante la Policía Nacional, que dio origen a una investigación por un delito de hurto con engaño.
Según fuentes policiales consultadas por La Voz, se sospecha que los autores de este tipo de delitos con engaño pueden ser gente relacionada con el mundo de las toxicomanías, aunque en las investigaciones no se descarta ninguna otra hipótesis, incluida la de que también puede tratarse de personas extranjeras.
En la misma parroquia de Sedes se produjo también un robo en otra vivienda, de la que los ladrones se llevaron dinero y algunas joyas.
Esta avalancha de delitos contra la propiedad privada ha propiciado que la Comisaría de Ferrol-Narón refuerce la vigilancia en determinadas franjas horarias y en las zonas más afectadas. De ahí que algunos equipos policiales estén realizando turnos extraordinarios por las noches y también en horario diurno, con el fin de lograr detener a los autores y ponerlos a disposición judicial.