A Suárez ya le protestan desde dentro

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

Los representantes sindicales de la plantilla municipal iniciaron ayer un calendario de movilizaciones para denunciar falta de personal y situaciones de riesgo laboral

19 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo venían advirtiendo desde hace tiempo y ayer lo llevaron a la práctica. El alcalde de Ferrol, Jorge Suárez, ya no solo tendrá que lidiar con las críticas de la oposición o las quejas de diferentes colectivos de la ciudad, sino que se le ha comenzado a revolucionar la casa por dentro. Los miembros de la Xunta de Persoal y del Comité de empresa del Concello -pertenecen a los sindicatos CSIF, CC.OO., UGT y CIG- protagonizaron ayer la primera de las movilizaciones que, según anunciaron, tendrán continuidad todos los martes, consistentes en concentraciones en la puerta del palacio municipal, de 12 a 13 horas.

La pancarta lo resume todo en dos frase: «Contra a inacción, mobilización!!! Abondan intencións, pasemos ás accións». Y es que las concentraciones de los representantes de la plantilla municipal van a ir acompañadas de otras acciones; la más inmediata, la presentación de una denuncia ante la Inspección de Traballo por las condiciones, en algunos casos de riesgo elevado, en las que desarrollan su actividad laboral en determinados servicios.

Las principales quejas de los trabajadores vienen dadas por el incumplimiento de acuerdos, algunos de ellos del 2016, la no ejecución de sentencias y la falta de convocatorias de la mesa de negociación y del Comité de Seguridade e Saúde Laboral, órganos en los que podrían comenzar a plantearse las soluciones que la plantilla demanda.

La gota que colmó el vaso tiene que ver, precisamente, con la mesa de negociación en la que tendría que abordarse la oferta de empleo público de este año, que el gobierno no ha convocado desde mayo, y es que los representantes sindicales temen que se pierda, un ejercicio más, la posibilidad de cubrir algunas plazas. El presidente de la Xunta de Persoal, Javier Sandá, sostiene que el plazo para convocar la oferta de empleo expiró el 2 de agosto; el alcalde considera que se trata de un plazo orientativo. «O alcalde comprometíase hai uns días a que a oferta de emprego público se convocaría en setembro; maña mesmo -por hoy- tería que celebrarse a mesa e nin siquera está convocada, nin hai proposta, nin nada de nada», apuntó ayer Sandá, añadiendo que desde que se llegó a un acuerdo en el capítulo de Personal, en febrero, y se aprobaron los presupuestos en mayo, «pasaron tres meses nos que puido ter moitas mesas, pero non se convocaron».

Y es que el principal problema es el déficit de personal. En esta línea, Sandá explicó que la plantilla lo viene padeciendo desde el 2016, cuando fueron las primeras movilizaciones, y puntualizó que puede que en aquel momento solo lo vieran los trabajadores, «pero agora xa o padecen os ferroláns que acuden o Concello, e teñen que facer largas colas en algunhas oficinas, como a de Estadística, na que hai uns anos había catro o cinco traballadores e a día de hoxe hai un ou dous».

En cuanto a las situaciones de riesgo por instalaciones inadecuadas que van a poner en conocimiento de la Inspección de Traballo, Javier Sandá relató algunas de ellas, como el portalón que se cayó recientemente en el parque contraincendios; los inadecuados equipos de protección para la retirada de nidos de velutina, que derivaron en que dejase de prestarse ese servicio; la sobrecarga que soporta el personal del cementerio, que tiene que mover manualmente pesadas lápidas por falta de maquinaria; los riesgos de agresión de la Policía por no disponer de un sistema de vigilancia adecuado en el cuartel; o la aplicación informática de letra muy pequeña que provoca problemas de visión y dolores de cabeza al personal.

A mayores, y dentro de la inacción de la que acusan al gobierno, denuncian la pérdida de una subvención de la Diputación de 26.000 euros destinados a reparaciones en el cuartel de la Policía Local, que se ha dejado ir porque el Concello no licitó las obras.