Los estudiantes todavía están a tiempo de matricularse en algunas titulaciones o acceder a una plaza en una residencia
28 ago 2018 . Actualizado a las 22:24 h.El mes de septiembre está a la vuelta de la esquina, algo que conocen bien los estudiantes que inician su etapa universitaria o que continúan con sus estudios en Ferrol, ya que están apurando sus últimos días de vacaciones antes de iniciar un nuevo curso. No solo están preparándose los alumnos, ya que el nuevo mes también supone una nueva etapa para las facultades, residencias, bibliotecas y cafeterías de la ciudad.
La Escuela Politécnica Superior de Ferrol inaugura el viernes, 7 de septiembre, un nuevo curso universitario, aunque el inicio de las clases será el lunes día 10. Grados como el de Ingeniería Industrial, Naval y Oceánica no están completos. La administradora de la escuela universitaria, Alma Díaz, lamenta los problemas que tienen los estudiantes matriculados en octubre: «El hecho de que los alumnos con asignaturas pendientes no puedan examinarse antes de septiembre provoca que empiecen el curso un mes después y esto es negativo para todos», explica.
Este año en las aulas se impartirá un nuevo máster de Diseño, Desarrollo y Comercialización de Productos de Videojuegos, que de momento está cumpliendo la expectativa de demanda: «Tenemos doce plazas cubiertas de veinticinco, el día cinco sale la segunda preinscripción y esperemos que se pueda llenar al completo», comenta Alma. Este curso, el campus ferrolano también estrena un grado de Moda.
Una vez que los alumnos ya están matriculados piensan directamente en donde van a vivir, una opción es la residencia Portanova que ya se prepara para un nuevo curso: «A principios de septiembre llegarán los nuevos residentes, la mayoría tienen dieciocho años y vienen de toda España», detalla la dueña, Maricarmen Bravo. La residencia aún tiene dos plazas libres y ofrece todo tipo de comodidades a los estudiantes por un precio entre 590 y 700 euros: «Tenemos pensión completa y en las habitaciones tienen de todo, incluido wifi», dice Maricarmen.
Los bares suelen ser lugares de almuerzo y reposo para estudiantes, bien sabe de ello Esther Losada, ya que su cafetería Quirófano II se encuentra situada enfrente de la Escuela Politécnica Superior: «De septiembre a julio vienen un montón de estudiantes , ya que tenemos precios asequibles pensando en ellos», explica Esther.
Por último, las bibliotecas como Casa do Patín también están trabajando para el nuevo curso, como es el caso del facultativo Tomás Lagunas: «Aquí ofrecemos servicios de préstamos, información, tareas bibliográficas, de como gestionar la información y son muchos los jóvenes que estudian aquí» declara.