Silencio sobre las fiestas con más ruido

J. C. m. FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

JORGE PARRI

El gobierno desmintió durante siete días el cartel para acabar admitiendo la filtración

29 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A falta de un mes para el arranque de las fiestas de verano, el gobierno local de Ferrol sigue sin presentar la programación de los festejos. Aunque los vecinos hace días, algo más de una semana, que, gracias a una filtración del cartel, admitida al fin por el titular de Cultura, conocen las grandes apuestas de las celebraciones. El empeño del ejecutivo por mantener la incógnita, desmintiendo primero y contestando con evasivas después las preguntas sobre el asunto, acabó por encender a la oposición.

¿Hay mimbres para la polémica?

Según quien conteste la respuesta será una o la contraria. La oposición, liderada por populares y socialistas, salió en tromba contra el gobierno de Jorge Suárez acusándolo de opacidad, tras enterarse por la prensa del cartel que, en teoría, debiera pasar por la correspondiente comisión informativa.

La confirmación de los conciertos por parte de las agencias de representación de Rosana, Xoel López, Kiko Veneno, Coque Malla y Gaiteros de Lisboa mientras el Concello seguía defendiendo con su «ni sí ni no» un calendario que había volado por los aires no hizo más que calentar los ánimos.

Parte de la oposición urgía explicaciones que, en ausencia del concejal, de vacaciones, nadie daba. Lo que motivó la petición de una comisión extraordinaria y urgente por parte de la edila Beatriz Sestayo para abordar por fin el tema, importante, sin duda, para la dinamización de la ciudad.

¿Por qué no se presentan de una vez las fiestas?

El gobierno local arguye ahora que no están completamente cerrados los expedientes de contratación. Algo que exigió el PP. Con ello, se aseguran evitar nuevas suspicacias y controversias. Y ya se ha dado traslado de la situación a los integrantes de la comisión de Cultura.

¿Cómo van a ser?

Atendiendo a las declaraciones del concejal serán «unas fiestas atractivas» con un presupuesto «moderado». Algo difícil de casar y que conlleva, en buena medida, la renuncia a contar con grandes estrellas del momento. Habrá pop, rock, músicas de raíz... todo condensado en ocho días, del 24 al 31 de agosto, y al gusto de quien contrata. Las fiestas participativas son historia. «É unha carallada», señalaba el edil.

¿Qué resta por conocer de los festejos?

Primero, posibles incorporaciones de última hora. Segundo, falta saber si Basterrechea cumplirá su promesa de que mientras sea responsable de las fiestas todos los conciertos serán gratuitos. Y tercero, descubrir la programación de actividades complementarias, destinadas a crear ambiente y llevar la fiesta a las calles. Es público, eso sí, que la Banda ferrolá de música tendrá un papel activo. Y Normalización Lingüística pondrá su granito de arena con espectáculos como «Bon Appettit» de Teatro Ghazafelhos, «A gramola gominola» o «A fiestra dos soños».

¿Están las fiestas abonadas a la polémica?

Sin duda. No hay año tranquilo. Ni este es el primer verano en el que una filtración hace trizas los planes promocionales de un gobierno. Como tampoco las denuncias de irregularidades en la contratación de servicios relacionados son una novedad. Los populares, que en 2017 denunciaron el montaje del palco de la plaza de España cuando aún no había cerrado el contrato, lo experimentaron en sus carnes, durante el mandato de Rey Varela.