Hugo Piñón, único gallego en un proyecto para recorrer el mundo: «Estoy de vacaciones de las vacaciones»

Hugo Piñón estaba trabajando en Polonia, en Google, cuando su padre le avisó de un trabajo que le iba al pelo: viajar por todo el mundo. «Es que ya había estado en 41 países de vacaciones y vivido en siete, así que no lo pensé me puse a preparar la candidatura», cuenta sobre un proyecto que se llama World life experience y al que se presentaron 45.000 jóvenes para cubrir solo doce puestos. «Pedían personas que quisiesen recorrer muchos países durante un año con un sueldo de 2.500 euros al mes y vacaciones. Parecía mentira, hasta me hizo dudar de que no fuese un timo. De hecho, mucha gente creyó que era una estafa», explica un ferrolano que acaba de cumplir 31 años.

El lunes regresó a Ferrol después de estar en ruta desde enero y es incapaz de hacer ni una valoración negativa: «Estoy de vacaciones de las vacaciones -declara-. Empezamos por Portugal, donde participamos en programas de reforestación por los incendios y después fuimos a Granada, a uno de los proyectos, que más me ha tocado y es el de un hombre que compró una urbanización para que allí se asentase gente que no tenía a donde ir». La misión de Hugo y de sus once compañeros es integrarse en la vida diaria de las agrupaciones que llevan a cabo proyectos sociales muy diferentes y después debe contarlo en las redes. Pasan diez días en cada país, de los que cinco o seis dedican a ser uno más de la comunidad que visitan. Por eso, este viajero ha construido un camino en campo de refugiados de Holanda y participado en las actividades que organiza una entidad de Eslovenia que ayuda a personas con parálisis cerebral, entre otras muchas labores. Después dedican un par de días a actividades culturales vinculadas a los patrocinadores de la gira y aún les quedan dos jornadas libres. «Lo curioso es que esos días también viajamos», cuenta siempre en plural porque los doce seleccionados viajan, trabajan y hasta duermen juntos, aunque a lo largo de la primera parte del año han perdido a dos integrantes del equipo: uno porque entró en el Gran Hermano de Brasil y otro porque lo reclamó su esposa para que regresase a la vida familiar.

«El mejor trabajo»

Hugo reconoce que es un adicto a la mochila: «Ahora llevo 53 países visitados, pero no me cansa -cuenta-. Yo estaba de profesor en una universidad francesa y mis amigos me decían: ‘Nunca vas a encontrar un trabajo mejor’, pero lo dejé y salió lo de Google en Polonia, y ahí mi familia volvió a insistir: ‘Nunca vas a encontrar un trabajo mejor’, pues sí, este, que es el mejor trabajo».

Solo hay un pero a esta experiencia y es que tiene caducidad: dura un año, aunque el proyecto continuará con caras nuevas. Hugo cuenta que el proceso de selección para la siguiente temporada del World life experience ya está abierto y detalla por qué cree que lo eligieron entre tantos candidatos: «Primero debes pasar un test de personalidad, porque en esta historia tienes que estar con tus compañeros las 24 horas del día !Hasta dormimos juntos en cada lugar, no hay individuales! -advierte-. Otro punto importante es el vídeo que les tienes que enviar sobre ti: yo quise hacer algo original en el que saliesen todos los lugares en los que había estado». El inglés es otro de los requisitos de un proceso que promueve una empresa afincada en Lisboa y que se puede seguir en la web www.worldlifeexperience.com, así como en las cuentas de cada uno de los aventureros participantes.

Tras un semestre tan intenso el único gallego, Hugo Piñón, asegura que ve Ferrol cambiado, aunque sobre todo ha cambiado él: «Abrí mi armario y me di cuenta de que me sobraba todo, así que lo doné». Eso sí, de mayor quiere vivir en Valdoviño.

El proyecto

En la web www.worldlifeexperience.com proponen la aventura de viajar durante un año visitando y contando proyectos sociales como hace Hugo en su cuenta de Instragram @hugao_7. Ya está abierto el proceso de selección para la segunda edición.

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