La moda de los bares de cereales llega a Ferrol de la mano del Capitol de Esteiro
06 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.En el verano del 2017, las hermanas Carla y Tamara Varela abrieron las puertas del bar Capitol de la avenida de Esteiro con una carta que ya llamaba la atención entonces por incluir reclamos dulces poco comunes por estos lares: tortitas americanas con sirope, crepes dulces pero galleguizados siguiendo la receta del típico freixó, batidos helados con sabor a Huevo Kinder y galletas Oreo... Todas esas propuestas calaron bien entre los parroquianos que suelen frecuentar el local, pero la verdadera «locura», cuentan Tamara y Carla, no llegó hasta el pasado mes de marzo, cuando las dos hermanas sorprendieron a la clientela con una propuesta que ya arrasa en otros puntos de España: los boles de cereales americanos con leche de colores.
«La verdad es que fue un auténtico bum, algo realmente exagerado; de la noche a la mañana el local se nos llenó de adolescentes deseosos de probar los cereales», cuenta Tamara, que confiesa que se le ocurrió la idea de implantar esta nueva experiencia gastronómica en el Capitol tras conocer el éxito obtenido por el primer cereal bar de Madrid.
Un mes después de poner en marcha la iniciativa, las dos hermanas cuentan que ahora la «locura ya no es tanta», aunque nunca faltan clientes a los que se les antoje comenzar el día o reponer fuerzas a media tarde con un buen desayuno o merienda a base de cereales. En el Capitol no se puede elegir entre tantas variedades como las que ofrecen otros establecimientos dedicados en exclusiva a este tipo de producto -como el Cereal World de A Coruña, abierto recientemente, donde se pueden catar hasta cien tipos de cereales-, pero los que sirven tienen su tirón. Están los Lucky Charms, de nubes de golosina; los Froot Loops, con sabor a frutas; los Crunch de chocolate, y también los Bloopers. Y todos ellos se pueden llevar a la boca acompañados de leche de vaca normal, chocolateada y hasta de colores (azul, rosa, verde y amarilla). «Además, para los veganos o gente que tenga alguna intolerancia o esté a régimen, también los podemos servir con leche de soja, de avena, sin lactosa y desnatada», advierte Tamara.
Una vez el cliente elige cereales y leche, el bol todavía puede seguir subiendo de nivel con algún topping, como mini galletas de diferentes tipos, nubes, golosinas... Pero, ¿por qué causan tanto furor estos cuencos tan coloridos? Las hermanas Varela cuentan que a muchos les pirra su sabor, pero reconocen que en el fenómeno gastronómico también hay mucho de postureo. «Hay gente que viene solo para hacerse la foto y subirla luego a Instagram», cuenta Tamara.
Sea por lo que sea, lo cierto es que los cereales arrasan allá por donde pasan y siempre hay a quienes les gusta promocionarlos en las redes sociales, como la influencer ferrolana Sara Noguerol, que fue una de las primeras clientas del bar Capitol en hacerse una foto con sus codiciados boles y subirla a las redes sociales en menos de un pispás.
Con todo -y a pesar del éxito cosechado-, Tamara y Carla no tienen claro cuánto durará esta desmesurada fiebre por los cereales y, por eso, no piensan jugárselo todo a una única carta. «Esto tiene mucho tirón entre la gente joven, pero las modas vienen y van y, además, también tenemos otro tipo de clientela que hay que cuidar», advierten. Por eso ya están pensando en nuevas propuestas, dulces y saladas, para renovar la carta de cara al verano. ¿Con qué nos sorprenderán esta vez?
De moda. El negocio de los bares de cereales surgió en Londres, de allí saltó a Madrid y ahora ha llegado también a Galicia.
La propuesta. El Bar Capitol ofrece distintos tipos de cereales americanos que se pueden tomar con leche de colores y cubrir con «toppings». ¿El precio? 3,5 euros.