Saúl llegó a Ferrol hace dos meses como refuerzo de O Parrulo para la recta final
23 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Saúl llegó a Ferrol desde Italia hace dos meses como uno de los refuerzos estrella de O Parrulo de cara a la recta final de la temporada. El jugador gaditano lleva trece años como profesional de fútbol sala, oficio que ya le trajo a Galicia en otras dos ocasiones, a Santiago y Lugo. «En Ferrol es la primera vez que estoy, y lo que más veo es el sol, está saliendo mucho», bromea.
Reconoce que aún no le ha dado tiempo a conocer mucho la zona. «No salgo mucho, al centro un poco, pero es una ciudad que me gusta, la gente es muy agradable y cercana», agradece. Saúl llegó en un momento crucial de O Parrulo, tras el partido contra el Jaén, que acabó con victoria y con el que se inició una racha de buenos resultados. «Cuando llegué estábamos antepenúltimos y seguimos antepenúltimos, pero es verdad que tenemos más factible el objetivo de evitar el descenso, aunque no dependa de nosotros», explica. Pero cree que la recta final de la temporada puede beneficiarles. «Ahora tenemos partidos en teoría más asequibles así que hay que ganarlos, nos aceraría más al objetivo», señala.
Con los compañeros está más que integrado ya. «Había coincido con Miguel en Santiago y con Adri en Murcia. Al resto de compañeros no tenía el placer de conocerlos hasta ahora. Son geniales, buena gente. Llevo trece años en el fútbol y se que cuando ganas las cosas son más sencillas, hemos tenido la suerte de enganchar varias victorias seguidas y un empate, y creo que con ese ánimo es más fácil trabajar y que haya buen ambiente», recalca.
Está adaptado ya a la dinámica del equipo pero, lo que más le cuesta, señala, es la forma física que se requiere en O Parrulo. «El nivel físico que requiere es más alto que el que se pide en Italia, donde llevaba años. A día de hoy me cuesta un poco todavía encontrar el equilibrio por mi forma de jugar, por ejemplo en casa todavía no he hecho mis mejores partidos, creo que puedo hacerlo mejor, y espero que lleguen. Pero independientemente de eso, mientras sigan llegando los resultados, el trabajo individual no me preocupa mucho», reconoce.
Con respecto al próximo partido contra el Gran Canaria (mañana, pabellón de A Malata, 19.30 horas), recalca su importancia. «Si Gran Canaria no gana aquí será muy difícil la permanencia para ellos, y si nosotros no conseguimos la victoria se complicaría un poco más», apunta. Por ello cree que es una final. «No podemos mirar más allá porque nos equivocaríamos si empezamos a hacer cuentas. El sábado tenemos que ganar independientemente de lo que hagan el resto de equipos», valora.
Y espera que de nuevo la afición llene A Malata. «Mañana el pabellón tiene que estar a reventar como el día del Santiago Futsal porque quedan tres partidos en casa y nos gusta notar su apoyo», agradece.