El astillero de Ferrol ha celebrado un acto para poner en valor el éxito de las F-100 y rendir homenaje a los que participaron en ese programa
19 mar 2018 . Actualizado a las 13:01 h.«Es el buque del futuro». Así ha calificado esta mañana el presidente de Navantia, Esteban García Vilasánchez, la fragata F-110, el programa en el que los astilleros públicos españoles tienen puestas grandes expectativas, ya que generará diez años de trabajo para la factoría de Ferrol, sustentará 7.000 empleos, tanto directos como indirectos, y supondrá un retorno para las arcas del Estado de forma que por cada euro invertido retornarán 3,4. El máximo responsable de la empresa, Esteban García Vilasánchez, desgranó las principales características de este programa, cinco unidades para la Armada española, cuya orden de ejecución se espera para los próximos meses. Así, explicó que «será el primer barco de combate certificado por Bureau Veritas, contará con una propulsión híbrida novedosa y con la mayor capacidad eléctrica». En un acto en el que participaron alrededor de cien trabajadores, como símbolo de la plantilla que trabajó en el programa de las F-100 y se proyectó un vídeo recogiendo su importancia, el presidente de Navantia puso en valor lo que supuso el programa de las F-100 tanto para la transformación de la empresa como para su internacionalización. Con ese modelo, recordó, se lograron contratos en Noruega y Australia. «La F-110 será la fragata del siglo XXI, la heredera de todos los esfuerzos que han hecho los trabajadores hasta llegar hasta aquí», afirmó García Vilasánchez.