De la fragata «Álvaro de Bazán» al podio de la peluquería canina

beatriz antón FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

Pedro Romero (a la izquierda), que se llevó el oro en principiantes, junto a su maestro, Juan Chedas, y Tamara Pego, que también acudió al concurso de Valladolid
Pedro Romero (a la izquierda), que se llevó el oro en principiantes, junto a su maestro, Juan Chedas, y Tamara Pego, que también acudió al concurso de Valladolid CESAR TOIMIL

Entre travesía y travesía, Pedro Romero aprendió a esculpir melenas caninas y su buena maña le ha valido ya un premio nacional

27 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ya una década que Pedro Antonio Romero Fonte (Ferrol, 1990) se gana el pan en las Fuerzas Armadas y, aunque asegura que «el mar engancha mucho», este marinero de la fragata F-101 Álvaro de Bazán reconoce que desde hace algún tiempo cultiva otra pasión que lo tiene como obnubilado. «A mí siempre me han gustado mucho los perros, así que hace cosa de una año decidí apuntarme a un curso de peluquería canina por curiosidad y ahora estoy enganchadísimo», apunta Pedro con mucha alegría.

La felicidad que irradia tiene su explicación y es que, tras pasar por la academia del ferrolano Juan Chedas -para el solo tiene piropos y al que califica como un «maestro de élite»-, este joven marinero de 28 años se ha revelado como un auténtico as en el arte de esculpir las melenas caninas. Y prueba de ello es que el pasado fin de semana, en Valladolid, Pedro logró auparse a lo alto más alto del podio del Campeonato Nacional de Peluquería Canina, donde se alzó como ganador de la categoría de principiantes.

Hasta allí acudió acompañado de su profesor, Juan Chedas, quien siempre tuvo el pálpito de que su joven pupilo podía regresar del certamen con un premio bajo el brazo. «Tiene muy buena técnica y, además, iba muy motivado porque esto es algo que le entusiasma de verdad», advierte este veterano maestro y uno de los pioneros de la peluquería canina en Galicia.

Con la ayuda de «Mía»

En la categoría de principiantes, los concursantes tenían libertad a la hora de elegir la técnica para demostrar sus habilidades y, sin dudarlo mucho, Pedro Romero se decantó por realizar un stripping, un método utilizado con los perros de pelo duro y que consiste en ir arrancando mechones a mano y con cuchilla. Para ello contó con la ayuda de la «modelo» Mía, una teckel del adiestrador mugardés Iago Triana, que le facilitó mucho el trabajo. «Si el perro no te conoce de nada se puede poner nervioso, pero con Mía fue todo muy sencillo, porque yo ya la había atendido varias ocasiones y unos días antes del campeonato me la llevé a mi casa para que se acostumbrase a mi presencia», advierte el peluquero recién laureado.

Junto a Romero -y formando parte del equipo «entrenado» por Juan Chedas-, también viajó a Valladolid la nedense Tamara Pego, que aunque hizo un buen papel no logró llevarse ningún premio. Y la comarca también estuvo representada por Adrián Crespo, alumno de Thiago Ferreira en la escuela de la peluquería canina y felina Patacán de Ferrol, que se llevó el bronce en la categoría de principiante con un corte escandinavo a Osvaldo, un perro caniche.

Con el sabor del éxito aún en los labios, el ganador del oro aprovecha ahora los días que todavía le quedan hasta la próxima navegación para seguir ejercitándose en el arte de esculpir melenas caninas. «Tengo que aprovechar el tiempo que estoy en tierra a tope, porque esto me ha motivado mucho y ahora ya pienso en presentarme a más concursos», dice Pedro ilusionado.