«La impunidad con la que actuaban los cazatesoros ha pasado a la historia»

FERROL CIUDAD

El director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática, Iván Negueruela, abrirá mañana el nuevo ciclo de la Cátedra Jorge Juan con una conferencia sobre el pecio de la «Mercedes»

25 oct 2017 . Actualizado a las 11:35 h.

Las expediciones llevadas a cabo frente a las costas de Cádiz a lo largo de los tres últimos veranos para recuperar los restos de la fragata Nuestra Señora de Las Mercedes han logrado situar a España en lo más alto de la arqueología subacuática mundial. Lo dice con cierto orgullo y contudencia Iván Negueruela (Valladolid, 1951), responsable de las expediciones y director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática de Cartagena, quien mañana -a las 19.30 horas, en Exponav- inaugurará el nuevo ciclo de conferencias de la Cátedra Jorge Juan con una charla sobre el tesoro de la Mercedes, un pecio expoliado por la empresa cazatesoros Odissey en el 2007 y recuperado por España en el 2012 tras un largo litigio en los tribunales de Estados Unidos.

-¿Qué han tenido de particular las expediciones a la «Mercedes» respecto a otras excavaciones submarinas?

-Lo más llamativo es que estas campañas se han desarrollado a 1.137 metros de profundidad, algo que no se había hecho hasta ahora en ningún punto del planeta. Esa sin duda ha sido la mayor dificultad, pero no la única, porque la fragata no se hundió en posición de navegación, sino que explotó a causa de un cañonazo de un buque inglés, por lo que el área de dispersión es inmensa, de unos 150 por 200 metros, y los restos se encuentran muy diseminados.

-¿Tras el caso de la Mercedes se puede decir que el patrimonio español submarino ya está a salvo de los cazatesoros?

-Antes del caso de la Mercedes, España también pleiteó por las fragatas Juno y La Galga, hundidas frente a las costas de Virginia y expoliadas por la empresa Sea Hunt. Son ya tres casos los que hemos ganado en los tribunales estadounidenses y, aunque nunca se puede decir que estamos a salvo de los saqueos al cien por cien, ahora los cazatesoros se lo piensan mucho más antes de actuar. Que una casa como Sothebys pueda sacar a subasta pública parte del tesoro de un buque español, como ocurrió cuando Franck Goddio expolió el galeón San Diego en Filipinas, es algo impensable hoy en día. La impunidad absoluta con la que actuaban los cazatesoros es algo que ya ha pasado a la historia.

-¿Qué balance hace de las tres campañas desarrolladas en el pecio de la Mercedes?

-El balance no podría ser más satisfactorio. En primer lugar, porque hemos demostrado a la comunidad científica internacional y muy especialmente a las empresas cazatesoros que España sí tiene los medios necesarios para desarrollar una expedición arqueológica a más de mil metros de profundidad. En segundo lugar, porque hemos certificado que las coordenadas del pecio que daba Odissey se corresponden efectivamente con el lugar en el que están los restos. Y en tercer lugar, porque hemos podido demostrar que esos restos corresponden a la Mercedes y no a otro barco. ¿De qué manera? Pues recuperando objetos que a ciencia cierta sabemos que transportaba la fragata, porque así se recoge en el Archivo de Indias.

-¿Qué lugar ocupa la arqueología subacuática española tras estos descubrimientos?

-Las campañas desarrolladas para recuperar los restos de los barcos fenicios de Mazarrón ya pusieron la metodología científica de la arqueología subacuática española en la cima de Europa y, ahora, con las expediciones a la Mercedes ese prestigio ha aumentado todavía más. El  reconocimiento internacional ha sido emocionante, enorme e incluso mayor que el que ha tenido en nuestro propio país.