El abandono se ceba con el Cantón

FERROL CIUDAD

CESAR TOIMIL

Bancos rotos, piedras del paseo arrancadas, losetas levantadas y papeleras comidas por el óxido conforman el panorama del gran pulmón verde del centro de Ferrol

04 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La falta de mantenimiento se evidencia en diferentes puntos de la ciudad, pero el Cantón de Molins, el principal pulmón verde del centro, la sufre especialmente, sobre todo en la zona más próxima a la iglesia de las Angustias. En el entorno del conocido como «cenicero», lugar en el que se acotó el botellón, presenta una imagen de total abandono, tanto en lo referente al mobiliario como al estado de las zonas de tránsito de los viandantes.

Hay varios bancos a los que les faltan los listones de madera del respaldo o del asiento, papeleras con la base oxidada que amenazan con desprenderse, tuberías a la vista por encima de las raíces de los árboles, pivotes torcidos y ramas de gran porte que fueron taladas en parte y se ha optado por afianzar el resto con troncos a modo de sujeción.

No obstante, la situación más grave se aprecia en el estado del firme de los senderos, por el peligro de caídas que representa. En los accesos al «cenicero» hay piedras de gran tamaño arrancadas y sueltas, y en la zona de losetas también hay algunas piezas levantadas por las esquinas.

También hay zonas oscuras en las que la iluminación nocturna o no funciona o es muy escasa.

En cuanto a la parte del Cantón en la que se acometieron obras de reforma a finales del anterior mandato, la zona adoquinada sigue vedando el paso de los viandantes, porque la superficie es muy irregular, debido a la forma en que se colocaron las piedras.

Jardines sin flores

En un recorrido por el Cantón se puede apreciar, asimismo, que en los espacios ajardinados brillan por su ausencia las plantas de temporada que suelen adornar otros espacios de la ciudad, por lo que crecen los hierbajos.

Por su parte, la pajarera, para la que se anunciaron diferentes usos, sigue estando mostrando sus entrañas totalmente vacía.

Los estanques están repletos de hojas de los árboles y la fuente central está apagada.

Soplahojas

La única actividad que sí se ve a diario en este importante espacio verde es la del personal de la empresa encargada de los jardines, con el soplador en mano para recoger las hojas desprendidas de los árboles.

Según se indica desde el Concello, los trabajos de reposición del firme corresponderían a la empresa de mantenimiento de viales, pero el proceso de contratación se está retrasando por cuestiones que no se han dado a conocer. El plazo para la presentación de ofertas concluyó en febrero pasado y la mesa de contratación seleccionó la propuesta de Mixturas el 22 de agosto, pero aún no se trató en comisión.