El Club de Campo sopla cuarenta velas

beatriz antón FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

Las piscinas del club, en una imagen de los años ochenta
cedida

La metamorfosis experimentada por las instalaciones desde su apertura en 1977 han convertido el complejo de Pazos en uno de los mejores de su clase en Galicia

21 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Círculo Mercantil e Industrial Club de Campo de Ferrol lleva una buena racha de celebraciones. El año pasado conmemoró por todo lo alto el centenario de la sociedad -nacida en 1916- y las tres décadas de vida de su emblemática rondalla. Y mañana mismo volverá descorchar las botellas de champán para celebrar, con una cena-baile, que sus instalaciones deportivas, lúdicas y sociales de Pazos, en Serantes, cumplen ya 40 años.

Según cuentan el presidente del club, Álvaro Sánchez, y su gerente, Javier Lorenzo, fue el 23 de julio de 1977 cuando el complejo abrió sus puertas a los socios por primera vez. La idea surgió de la directiva que comandaba por aquel entoncesel Círculo Mercantil e Industrial -con Francisco Gómez Deaño como presidente-, que decidió mejorar el servicio prestado a los socios con un espacio y unas instalaciones deportivas de las que carecía en su sede del Cantón.

De izquierda a derecha, José Rioseco, miembro de la directiva actual y de la que inauguró el club en 1977; el actual presidente, Álvaro Sánchez; y el gerente, Javier Lorenzo.
JOSÉ PARDO

El médico y atleta José Rioseco, miembro de la actual directiva -pero también de aquella del 77-, recuerda que muchos de los miembros del equipo de Gómez Deaño tuvieron que comprometer su propio patrimonio para solicitar préstamos con los que ejecutar la obra. Y hasta fueron capaces de persuadir al mismísimo Franco para que les concediese una subvención de cinco millones de pesetas para los trabajos. «Nos reunimos con él en el Pazo de Meirás en agosto de 1975 y todos salimos de aquel encuentro convencidos de que moriría poco después», rememora Rioseco.

Obras de reforma

Con el dinero ya en la mano, la directiva de Gómez Deaño fue capaz de cumplir su sueño. El Club de Campo abrió sus puertas con cuatro pistas de tenis, un edificio social y tres piscinas exteriores en 1977 y, desde entonces, no ha dejado de someterse a diferentes obras de remodelación y reforma, hasta convertirse «en uno de los mejores, sino el mejor, complejo lúdico y deportivo de su clase que hay en Galicia», en opinión de Rioseco.

Lorenzo, gerente del club desde hace más de dos décadas, asegura que al doctor no le falta razón. Y avala su opinión con datos y cifras. En estas cuatro décadas, la superficie del club se multiplicó por dos -pasando de 30.000 a 60.000 metros cuadrados- y mejoró sus instalaciones con la rehabilitación de la casita (una vivienda de piedra que estaba en ruinas), la ampliación del edificio social y, ya en el en el 2010, con la construcción de un nuevo complejo deportivo con piscina climatizada, un spa con jacuzzi, baño turco y saunas, gimnasio, sala de bicicletas y sala de actividades. Además, de cuatro pista de tenis se pasó a seis (dos de ellas cubiertas), se construyeron cuatro pistas de pádel (tres cubiertas) y se creó una nueva pista multideportiva.

Un cambio «radical». Eso fue lo que supuso para el Club de Campo la inauguración, en el año 2010, de un complejo deportivo con piscina climatizada, spa y gimnasio.
JOSE PARDO

«Esta obra supuso un cambio radical para el club y consiguió revitalizar su actividad durante el invierno», anota Lorenzo, al tiempo que apunta que en aquellos años también se disparó el número de socios hasta llegar a los 2.000. Hoy son 1.750 -aunque el número real de usuarios supera los 5.200, porque en cada unidad familiar solo paga la cuota una persona- y, a pesar de que la cifra ha bajado ligeramente desde el 2010, en los últimos tres años se ha conseguido mantener estable. «Nos sentimos muy orgullosos, porque aunque la crisis nos afectó, como a otras muchas sociedades de Galicia, algunas de las cuales incluso se vieron abocadas a la desaparición, el Club de Campo siempre se ha mantenido muy vivo y, con el apoyo de todos los socios, nunca dejó de acometer obras y reformas para mejorar», dice con satisfacción el presi, como se refiere Lorenzo con cariño a Álvaro Sánchez.