El Uni Ferrol se despide con honor en Esteiro de una temporada para el recuerdo

FERROL CIUDAD

El Star Center cae contra el Perfumerías Avenida (39-61) en el segundo partido de semifinales

19 abr 2017 . Actualizado a las 00:56 h.

El resultado fue lo de menos. La sensación, después de una temporada para el recuerdo, lo de más. El Star Center Uni Ferrol mantuvo la garra hasta el último suspiro frente al Perfumerías Avenida, que demostró su superioridad en todo momento, sobre todo cuando el marcador se ajustaba. Esteiro apretó, pero la diferencia fue insalvable (39-61) para que las salmantinas pusieran el segundo punto de la eliminatioria.

El fin de fiesta, no obstante, fue inmejorable, con Lino López cambiando una a una a las jugadoras, para que las protagonistas tuvieran su ovación, tras un partido abanderado por la tensión, en el que solo hubo un borrón: la eliminación de Barbee, por dos antideportivas, que provocó que acabara el encuentro en los vestuarios. Una vez acabado el duelo, escuchó, como todas, el «¡Ese Uni! ¡Ese Uni!» sobre el parqué.

El equipo ferrolano soñó, sobre todo, en los primeros veinte minutos. A pesar de que a las jugadoras les costó arrancar (0-10) y no abrieron el marcador hasta un triple de Ani Calvo a los cuatro minutos, a continuación llegó su mejor versión. Ese lanzamiento inició un parcial de 12-2, que puso las tablas por primera y última vez (12-12). La ilusión por lograr la proeza era máxima. Sin embargo, otra racha del Avenida rompió el duelo (12-22).

Esa brecha, la llamada psicológica, de diez puntos, fue en la que se movió el Uni hasta el descanso. Se notaba, eso sí, que cada canasta era sufrida ante la intensa defensa salmantina. El Avenida dominó en la zona y a las ferrolanas les faltó acierto exterior (5-20 en triples) para mantenerse vivas.

El choque se rompió definitivamente al final del tercer cuarto, en un ambiente ensordecedor por el enfado del público con el arbitraje, al que Lino restó importancia al final del choque. Fue ahí cuando Barbee acabó fuera y las pilas parecieron agotarse.

La energía regresó tras el duelo para un adiós con el corazón mutuo entre plantilla y afición.