La Semana Santa arranca con buen tiempo y calles y hostelería llenas

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL CIUDAD

Iris Producións

Miles de personas disfrutaron en el casco histórico de un Domingo de Ramos con temperaturas veraniegas

10 abr 2017 . Actualizado a las 11:36 h.

La Semana Santa de Ferrol no entiende de edades, ni de condiciones y, como conocen muy bien los ferrolanos, su dimensión trasciende de la vertiente puramente religiosa. Ayer, de nuevo quedó patente en las calles y plazas de la ciudad, que en algunos momentos se quedaron pequeñas para acoger a las miles de personas que quisieron participar en el estreno de la mayor Pasión de Galicia.

El buen tiempo que acompañó durante toda la jornada, con temperaturas máximas de 26 grados, más propias del verano que de la primavera, favoreció una mayor afluencia a las primeras procesiones, ya tradicionalmente muy alta. La jornada arrancó a las 11.15 horas, con la bendición de ramos en la plaza de las Angustias, que fue seguida de la procesión de Jesús Amigo de los Niños, que discurrió por las calles de Esteiro.

Junto a las palmas que las familias compran las jornadas antes en las floristerías, muchos optaron por mantener la tradición de llevar a bendecir ramos de olivo y de laurel. Ambos casos se vieron ayer en la multitudinaria bendición de ramos que se celebró a las 12.15 horas en la plaza de Amboage.

Posteriormente, se inició la procesión de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén, de la Cofradía de Dolores, que de nuevo congregó a centenares de personas en las calles para presenciar el paso de dos de las imágenes más queridas en la Semana Santa ferrolana, la conocida como la de la Borriquita y la de San Juan.

El último desfile de la jornada, el del Ecce Homo, de la Cofradía de la Soledad, partió a las ocho de la tarde de la capilla de la Orden Tercera, también con un lleno en las calles.

La hostelería vivió ayer una de las jornadas grandes de estas fechas, repleta de comensales sobre todo en las terrazas.