«La recuperación de la ría será lenta, un mínimo de cuatro o cinco años»

Ana F. Cuba FERROL

FERROL CIUDAD

CESAR TOIMIL

«Los fangos dejarán de tener la fuerte carga de materia orgánica y se asentarán especies que desaparecieron»

07 abr 2017 . Actualizado a las 13:18 h.

Victoriano Urgorri (Ferrol, 1951), catedrático de Zooloxía Mariña de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) y director de la Estación de Bioloxía Mariña da Graña, estima en «un mínimo de cuatro o cinco años» el plazo para la regeneración de la ría, una vez que esté operativo el saneamiento integral. «Tenía que haberse resuelto desde hace mucho tiempo», sostiene, y deja claro que ni las especies marinas se van a recuperar ni los malos olores de la marea baja van a desaparecer «de un día para otro».

-Después de 20 años vertiendo directamente a la ría...

-Veinte años no, toda la vida.

-¿En qué plazo podremos ver la repercusión del saneamiento?

-No será rápido. La renovación del agua de la ría, el saneamiento, por no tener ya vertidos, requiere la desaparición de toda la materia orgánica contaminante, y de eso se encargan las bacterias, que mineralizan la materia orgánica, un proceso que no sabemos cuánto va a durar. Calculo que harán falta un mínimo de cuatro o cinco años para que la ría vuelva a ser como antes, aunque eso es imposible, porque también hay otros contaminantes; lo que va a producirse es una recuperación en relación con los efluentes fecales (de domicilios), pero hay restos industriales y de otro tipo que no se van a canalizar a través de la EDAR (estación depuradora de aguas residuales).

-¿Qué ocurrirá con la cantidad de lodos acumulados en el fondo?

-Los fondos están fuertemente cargados de materia orgánica y todo eso tiene que mineralizarse. Los lodos, o fangos, son un tipo de sedimento, muy finos. Que un fondo sea de fango, arena o cascajo está en función de la energía con la que se mueva el agua; en un sitio con una corriente fuerte, se lleva los sedimentos menos pesados y a medida que va perdiendo velocidad los va depositando. El problema está en los espacios que dejan entre sí los granos de arena, donde se acumula la materia orgánica procedente de estos efluentes urbanos; eso es lo que ahoga, asfixia los sedimentos, que no tienen oxígeno porque no puede circular el agua. Eso es lo que tiene que ir desapareciendo. Y como la ría está tan colmatada de materia orgánica, la mineralización no la hacen las bacterias orgánicas (en presencia de oxígeno), sino las anaeróbicas, que liberan sulfídrico, que genera ese olor a huevos podridos que llega cuando pasas por algunas zonas con marea baja. Al ir mineralizándose, los sedimentos dejarán de tener esa fuerte carga de materia orgánica y empezará a circular el agua por ellos, lo que producirá una mejora para el asentamiento de nuevo de todas aquellas especies que desaparecieron (estima unas 3.000). Es lo que se espera, cuándo, no lo sé.

-¿Cómo afectará a la producción de marisco?

-El crecimiento del marisco en la ría no es malo, porque este tipo de contaminación afecta más a los sedimentos que al agua, y la ría de Ferrol tiene una buena renovación de agua, por la corriente del canal. El marisco dispone de fitoplancton, pero como hay también muchísimos otros microorganismos, procedentes de la contaminación, no es consumible porque es peligroso para la salud. Sigue habiendo almejas, a lo mejor no en tanta cantidad como en otras épocas, pero no nos podemos comer la que procede de la zona C porque tiene coliformes y otros muchos microorganismos. En ese aspecto también mejoraremos, pero necesitaremos unos años para apreciarlo.

-¿Cuándo se va a poder bañar la gente en la playa de Caranza?

-Cuando los datos analíticos de las aguas y los sedimentos digan que han bajado los niveles de coliformes y contaminantes. Si yo dijera tantos meses, sería Rappel.

«Propusimos al Concello un proyecto de seguimiento, pero no salió adelante»

La acumulación de vertidos durante tantos años a la ría -400 millones de metros cúbicos de aguas fecales y residuales- ralentizará el proceso de recuperación. «Es una barbaridad; tiene que ser lento porque lo que tiene que limpiarse es mucho. Para que la ría de Ferrol esté en una situación mínimamente decente -reitera Urgorri-, calculo un mínimo de cuatro o cinco años».

-Pero la puesta en marcha de la red de saneamiento será determinante para el futuro de la ría.

-Totalmente, sobre todo cuando sea realmente integral, porque las pequeñas poblaciones de la ría, como por ejemplo A Graña, Cabanas y Brión, vierten al mar, porque aún no están conectadas a la depuradora, y San Felipe supongo que tampoco. Tendrá que ser total, que no vaya ningún residuo fecal directamente a la ría sin pasar por la depuración.

-Tendrá que haber un control de cómo evoluciona el proceso.

-Lo ideal sería hacer un seguimiento de esa recuperación. De hecho, la Estación de Bioloxía Mariña da Graña (EBMG) había propuesto, ya al anterior alcalde, un proyecto, Rexenera Ría, para ver cómo se iba recuperando la ría; pero a veces estas cosas, o no interesan o realmente no hay dinero, y no se llevó a cabo (...). Nosotros (la EBMG, una institución científica que forma parte de la USC) no somos una oenegé, no trabajamos por amor al arte, hacemos proyectos financiados. Propusimos al Concello un proyecto de seguimiento para ir tomando muestras periódicamente e ir viendo la evolución, pero no salió adelante. Como conjunto de la ría, nosotros, sin financiación, no podemos abordar un trabajo que cuesta dinero.