Flamenco con «duende» ferrolano

beatriz antón LA VOZ / FERROL

FERROL CIUDAD

i. garcía

Aprendió a bailar por bulerías viendo vídeos de Farruquito y a los doce años ya lo llamaban para animar las fiestas; hoy llena locales como miembro del grupo Kelibén

03 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Isaías Salazar se crio en el barrio ferrolano de Tejeras y, mientras sus amigos se entretenían dándole patadas a un balón o jugando al escondite, él prefería pasar las horas pegado al televisor, analizando una y otra vez los pasos de baile de Farruquito. «Fue así como aprendí a bailar, viendo muchos vídeos y dándole muchas veces al pause, al play y al rewind», rememora entre risas echando la vista atrás. Con doce años ya lo estaban llamando para animar las fiestas familiares con sus bulerías y sus soleás. Y con diecinueve inició una trayectoria profesional que lo llevó hasta el grupo Kelibén, con el que ahora -a sus 23 años y junto al guitarrista ceutí Miguel Flores y la cantaora coruñesa Sandra Calderón- consigue llenar locales por toda Galicia.

«¿Qué si gusta el flamenco en esta tierra? La verdad es que sorprende mucho, porque el público no está acostumbrado a este tipo de espectáculos, pero a la gente le encanta», dice Isaías, que ahora vive en Santiago, aunque asegura que se siente «ferrolano de pura cepa» y regresa a Tejeras siempre que puede.

Con Kelibén lleva un año pisando los escenarios y aportando el «duende» su baile a un espectáculo que se aproxima a los diferentes palos del flamenco a través de composiciones propias, pero también con temas de la tradición más pura y con canciones de otros estilos adaptadas al género (como Volver o Al Alba). La propuesta resulta muy rompedora, sobre todo en Galicia, donde -como dice el guitarrista del grupo, Miguel Flores- «resulta difícil poder ver un montaje de flamenco genuino, que vaya más allá del tópico de las sevillanas».

Isaías comparte esa opinión y asegura que la sorpresa suele ser la primera reacción del público gallego, pero también la de muchos artistas que llegan de fuera y se quedan boquiabiertos al comprobar que en este rincón del norte se zapatea con igual pasión que en el sur. Eso fue lo que le ocurrió a Isaías cuando tuvo la «suerte» de actuar junto a dos artistas que, como él dice, ya «juegan en la Champions League del flamenco»: el guitarrista Josemi Carmona, que formó parte de Ketama y la Barbería del Sur, y el cantaor Juan Rafael Cortés Santiago, más conocido como Duquende, cuya voz ha acompañado a estrellas como Paco de Lucía, Tomatito, Josele o Raimundo Amador.

«Los flamencos de fuera, cuando les hablas de Galicia, piensan que aquí solo hay muñeiras y se quedan bastante sorprendidos al ver que un gallego puede bailar por bulerías. Pero eso es algo que también me pasa aquí. Cuando voy a bailar a los locales, mucha gente me pregunta si soy de Cádiz o de Sevilla y cuando les digo que soy de Ferrol alucinan», comenta Isaías.

La que también alucina, pero de orgullo, es la familia de este joven dotado para un arte que bebe de las culturas árabe y andaluza, pero también de la gitana, que es la suya. Porque, aunque Isaías tuvo que aprender a bailar viendo vídeos por la tele, en su casa el flamenco no era algo desconocido: «En Tejeras hay mucha gente que canta y toca la guitarra y yo de niño crecí escuchando la música que ponía mi padre: El Chocolate, Los Banis, Parrita...». Aquel ambiente le sirvió de caldo de cultivo para aprender a mover a los pies sin más maestros que sus ganas de aprender, pero con mucha pasión y sentimiento. «Yo creo que los gitanos llevamos algo dentro, tal vez sea eso que llaman duende, que nos lleva al flamenco de una forma natural», advierte Salazar.

Llega la despedida, pero antes del adiós surge una pregunta. ¿Qué les diría a aquellos que reniegan del flamenco? «Pues que tengan los oídos abiertos, porque hay que escuchar de todo, no solo rock. Y, además, lo que se vive en un espectáculo en directo no tiene nada que ver con verlo por televisión».

Referentes. Isaías admira sobre todo a los bailaores de la llamada Escuela de los Farrucos: Farruquito, El Farru y Carpeta. También cita entre sus referentes a Antonio Canales

Su barrio. Se crio en Tejeras y su colegio era el Santa Juana de Lestonnac.