Los empleados aportan en torno a 70 euros de su nómina para recibir el paquete
13 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Es de sobra conocido que en Navantia, con motivo de las fechas navideñas, no se entregan cestas o paquetes, sino cartuchos. Una costumbre con mucho recorrido que, después de dos años de parón (2013 y 2014) en los que llegó a judicializarse, parece haberse vuelto a retomar como una tradición.
Este lunes, la planta baja del hipermercado Froiz vivió la primera de las cinco tandas de reparto correspondientes al astillero de Ferrol, lo que se tradujo en un colapso del tráfico en la zona que sorprendió a los que desconocían lo que ocurría. No obstante, la Policía Local era consciente de que iba a haber un pequeño embotellamiento y trasladó una unidad hasta el lugar, en la zona de O Alto do Castiñeiro.
Los agentes controlaron el flujo hacia el aparcamiento, en el que la compañía naval dispone una especie de circuito para que la entrega sea ágil y no se produzcan largas colas.
El año pasado fueron los comités de empresa de la ría los que asumieron la gestión del cartucho, pero este año se ha encargado la dirección. Un cambio que, sin embargo, no ha afectado a la empresa adjudicataria de prepararlos.
Navantia Fene realizó la entrega en el interior del astillero y, aunque todavía no se han recontado, la cifra de cajas expedidas ha sido en torno a 4.000. Mientras, para el astillero ferrolano se han previsto unas 7.300.
El horario de expedición es entre las 10 y las 13.30 horas, por la mañana, y entre las 16.30 y las 20 horas, por la tarde. Durante la jornada de este lunes lo recogieron los beneficiarios con apellidos entre Abad y Devesa González y hoy es el turno de lo que van desde Díaz Amado hasta González Pita. Mañana, el jueves y el viernes habrá tres grupos más.
Detraído del salario
El cartucho navideño no es un regalo de la compañía, sino un concepto que se detrae de la nómina de los empleados, que este año ronda los 70 euros. Se trata de un derecho que, además, viene recogido en el convenio colectivo.
La firma pública lo denomina oficialmente «Reparto Nadal 2016» y detalla que lo pueden recoger personal activo, personal pasivo (prejubilados y jubilados), viudas y huérfanos. Para que la entrega sea lo más rápida posible, la empresa ha desplazado al lugar a cuatro empleadas con sus correspondientes ordenadores.
Los beneficiaros salen por la puerta del centro comercial con una caja de cartón con una treintena de productos y, además, con una garrafa de tres litros de aceite de oliva, que, por lo que ocupa, el hipermercado opta por dejar fuera del paquete.
El cartucho está compuesto por artículos, tanto típicos de la Navidad como no, de toda clase: cuatro tabletas de turrón (Alicante, Jijona, chocolate y yema tostada), una torta de turrón Alicante, una caja de polvorones, bolsas de pasas, higos y nueces, una lata de melocotón y otra de piña en almíbar, tres botellas de vino (Rías Baixas, Rioja y Mencía), un chorizo, un salchichón, un queso, latas de espárragos, zamburiñas en salsa de vieira, bonito, sardinillas y mejillones, un estuche de trufas, un paquete de café, un tarro de miel, una caja de galletas surtidas y botellas de licor café, aguardiente de orujo y aguardiente de hierbas.