El «Moracho» se enfrenta a la pena de 13 años de prisión por homicidio

FERROL CIUDAD

Traslado de «El Moracho» al juzgado de Ferrol el 16 de marzo
Traslado de «El Moracho» al juzgado de Ferrol el 16 de marzo ANGEL MANSO

Los clanes reñidos por la muerte de Jesús Rivero tuvieron otra reyerta en Difuntos

13 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando ya han transcurrido ocho meses desde que Jesús Rivero Conchado murió por apuñalamiento en la fiesta de cumpleaños de un niño que se celebraba en un restaurante de Serantes, lejos de calmarse los ánimos entre las familias implicadas, la situación se ha agravado más. El día de Difuntos en el cementerio de Feáns se libró una pequeña batalla entre mujeres, cuando las de A Coruña impidieron el acceso a la necrópolis a las de Ferrol, todas ellas armadas con estacas y palos.

Lo comenta la propia familia del fallecido, que impidió a toda costa entrar en el cementerio a varias personas entre las que se encontraba un sobrino del Moracho, el patriarca ferrolano de 73 años encarcelado en el penal de A Lama por la muerte de Jesús Rivero, crimen que él mismo reconoció aunque alegó que lo hizo en defensa propia.

Por este hecho, la Fiscalía solicita para Manuel Salazar Camacho la pena de 13 años de prisión, así como el abono de 180.000 euros a los herederos del muerto en concepto de responsabilidad civil y daños morales.

En las conclusiones provisionales del Ministerio público se recoge que durante la fiesta se inició una reyerta entre un gran número de invitados -la mayoría eran de etnia gitana- y que en el transcurso de la misma la víctima fue desplazada por la multitud hasta colocarse frente al acusado, que lo apuñaló clavándola una navaja en el lado izquierdo del pecho.

Tras la agresión, Jesús Rivero Conchado, de 39 años y conocido por el alias de El Algarrobo, solo o con ayuda de otra persona salió por su propio pie del restaurante y se desplazó hasta la acera de enfrente, donde fue recogido por un vehículo que lo trasladó al Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol (CHUF). En el servicio de Urgencias entró en parada cardiorrespiratoria, si bien lograron reanimarlo.

Debido a que presentaba una herida incisa que afectaba a la arteria mamaria y al pulmón izquierdo sufrió un shock hemorrágico severo con inestabilidad hemodinámica, por lo que fue trasladado al Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) para ser intervenido quirúrgicamente, pero falleció esa misma mañana a causa de la gravedad de las lesiones que presentaba.

 Confesión

Tres días después, el acusado confesó su autoría ante la Policía Nacional, por lo que se procedió a su detención y el juez ordenó su ingreso en prisión, donde continúa. Para evitar incidentes en la cárcel de Teixeiro, la que le correspondía y en la que hay presos de la familia de la víctima, se accedió a la petición de la familia de que el Moracho entrase en A Lama, en Pontevedra. Su abogado solicitó recientemente su traslado al penal de Monterroso, en Lugo, por ser más cercano al lugar de residencia de la familia, pero el juez instructor no accedió a la petición.

Desde el primer momento la Policía adoptó grandes medidas de seguridad para evitar enfrentamientos entre las familias de Ferrol y A Coruña, que incluso están ligadas por lazos de consanguinidad, ya que el Moracho es tío de la esposa del fallecido.