Ferrol y su «novo tempo»

Andrés Vellón Graña
ANDRÉS VELLÓN LA GÁRGOLA

FERROL CIUDAD

31 oct 2016 . Actualizado a las 23:14 h.

Visto el pleno del jueves en el Concello de Ferrol da vértigo pensar lo que queda por delante hasta las próximas municipales. O mucho cambian las cosas -diga usted que no tiene pinta- o aquí las sesiones en las que los representantes de los vecinos se reúnen para (sobre el papel) tratar temas de calado para la ciudad y sus habitantes se van a convertir en un cuadrilátero pugilístico. Entiéndase, claro, la metáfora. Si en la época de Juan Juncal en la alcaldía se llegó a calificar el pleno como un «manifestódromo», ahora la cosa es más interna. Más de dentro. El divorcio entre el «grupo Sestayo» y el de Jorge Suárez está ahí. El del «grupo Sestayo» con las edilas Rosa Méndez y María Fernández Lemos, que se presentaron en las listas del PSOE, también está ahí. Y, oiga, no parece que vayan a arreglarse de común acuerdo. Para nada. ¿Dónde está aquella roca que, decían, era el gobierno FeC-PSOE? Dinamitada y hecha trizas. ¿Dónde están las nuevas políticas? Aún se investiga sobre ellas y sus frutos. Diga usted que las cosas hay que verlas con la perspectiva que va dando el paso del tiempo. Y esa perspectiva parece indicar que esto va a ser más largo que un día sin pan. Que al pleno convendrá ir con escudo. No vaya a ser que un puñal cruzado haga herida donde no debe. Como ya se ha dicho otras veces desde estas líneas, es difícil gestionar cuando se está continuamente en la trinchera, además de en franca minoría. Dijo el alcalde en el pleno de su investidura que Ferrol afrontaba «un novo tempo». Sestayo prometió «coherencia, lealdade e compromiso». Y así se anda menos de año y medio después.