De saltar bordillos en A Malata a medirse contra las mejores de Europa

FERROL CIUDAD

La fenesa de quince años ha quedado sexta en el European Freestyle Skating Championship

08 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo que empezó como un juego en el parque subida a sus patines en línea se ha convertido en su mayor pasión. Con quince años recién cumplidos, la fenesa Noelia Cob se ha convertido en más que una promesa del patinaje. Como miembro de la selección española acaba de conseguir el sexto puesto en la prueba absoluta de salto del European Freestyle Skating Championship, que se celebra estos días en Ciudad Real. En el certamen que Noelia está disfrutando muy intensamente se han dado cita los mejores de este deporte de países como Francia, Italia, Rusia, Polonia o España. «Con el nivel que hay estoy contenta con el resultado», reconoce.

«Estoy disfrutando mucho la experiencia y viendo a los mejores patinadores de Europa, todo esto es nuevo para mí», destacó Noelia. La afición le viene desde que era pequeña y jugaba en el parque, comenta su madre Marisa, que ha viajado con ella para acompañarla en este momento tan especial. Hace dos años, lo que empezó como un juego se convirtió en una afición deportiva y Noelia comenzó a formarse en Sobre Rodas Escola de Patinaxe. «Nos gustó mucho la escuela. Estamos muy agradecidos, a los monitores les pareció que la niña tenía facultades y muchas posibilidades y así comenzó a aprender más técnicas en clase», recuerda Marisa. Por su parte, Noelia señala que la afición empezó al «conocer la escuela y ver que podía aprender con ellos cosas nuevas y mejorar lo que sabía».

La fenesa acaba de empezar cuarto de la ESO y dedica el poco tiempo libre que le dejan sus estudios a practicar el deporte en patines. Tiene «claro» que primero son los estudios, recuerda su madre, aunque por nada del mundo le gustaría bajarse de los patines. «Solo practico este deporte. No entreno mucho comparado con mis contrincantes y saltando precisamente no me caigo mucho», explica. A los entrenamientos con la escuela suma salidas por A Malata. «Ferrol no es nada accesible para patinar por libre, se puede hacer algo cuando quedamos en A Malata pero el skate park está bastante dejado y el paseo también está muy deteriorado», apunta la madre.

Un material deportivo caro

El haber dado un salto cualitativo de nivel tan importante hasta competir en certámenes nacionales e internacionales ha provocado que este deporte suponga también un mayor desembolso económico para la familia. «Las clases no son nada caras la verdad, lo caro es el material. Los patines cuestan una pasta, las ruedas se desgastan muy rápido, en los saltos sufren mucho...», señala Marisa. Para poder participar en este campeonato ha contado con el patrocinio de Error! Ferrol e Flying Eagle Skates Official.