El gordo de Navidad se compra en verano

Carla Elías Martínez
Carla Elías FERROL

FERROL CIUDAD

ANGEL MANSO

Las administraciones aprovechan el tirón que conlleva la llegada de los turistas

24 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Ataviados con bañadores y toallas poco son los que piensan ya en las próximas Navidades, el frío y los dulces. Sin embargo, el tirón de los veraneantes y turistas que visiten este verano Ferrol es aprovechado por las administraciones de lotería. Desde comienzos de este mes ya se puede ver en sus escaparates el cartel de «E se cae aquí o gordo de Nadal?». Supone el arranque de la campaña con un importante porcentaje de las ventas del sorteo que se celebrará en diciembre.

«Los números más bonitos se pueden coger en estas fechas, luego siempre quedan los números más feos, los que nadie quiere», alerta Amparo Parada, de la administración número 8, ubicada en la calle Rochel. «Hay que aprovechar la gente que viene de vacaciones y aparte, sino, no tendríamos tiempo suficiente para vender toda la lotería que nos llega», explica. En los meses de verano, julio, agosto y septiembre, las administraciones hacen su particular agosto ya que estiman que pueden vender sobre el 10 % del total de los boletos de Navidad. Carlos Fernández y Marisol López están al frente de la administración número 9 de Ferrol, ubicada en la calle Rubalcava. La colocaron ya el día 4 de julio. «Se hace una buena venta, se aprovecha el tirón, la gente que viene de fuera siempre le gusta llevar décimos de donde está de vacaciones», señala Fernández. Marisol es una de las loteras veteranas de Ferrol, lleva en la entidad de la calle Rubalcava desde el año 1974. En su entidad también han repartido a lo largo de los años varios premios

Probabilidad

La probabilidad de que una persona acierte con el décimo del gordo si compra un solo número es de uno entre 100.000; si compra dos números diferentes este porcentaje subirá a dos entre 100.000 y así sucesivamente, y muchos optan por intentar adquirir los boletos por diferentes puntos de la geografía en busca de más oportunidades de ganar. «La gente de fuera viene buscando la suerte aquí», reconoce Amparo.

Pero no solo se vende a los veraneantes. Hay clientes habituales de lo más previsores que ya comienzan a tentar a la suerte en búsqueda de números con algún significado, explica Alejandra Espiña, de la administración 11, ubicada en Alcampo.