Hace veinte años, la parte trasera del centro cultural se encontraba a la espera de su rehabilitación
21 abr 2016 . Actualizado a las 12:09 h.Hace veinte años, el centro cultural municipal de Ferrol, hoy conocido como Torrente Ballester, todavía se encontraba inconcluso. En una noticia publicada por La Voz el 21 de abril de 1996, se informaba sobre una proposición no de ley presentada por el PSOE en el Parlamento de Galicia para reclamar que se finalizasen las obras de rehabilitación del antiguo Hospital de Caridad, reformado para acoger la infraestructura cultural. Aunque una parte del histórico edificio ya funcionaba como centro cultural, su parte trasera -donde estaba previsto ubicar un auditorio de seiscientas plazas- todavía estaba a la espera de las obras. La proposición no de ley para que la Xunta llevase a cabo estos trabajos fue presentada por el portavoz Miguel Cortizo y el diputado Bonifacio Borreiros, quien calificó la intervención como «una obra pública emblemática para a cidade».
Además de un auditorio, en la parte trasera del antiguo Hospital Caridad también se había previsto habilitar las dependencias de la Casa de la Xuventude, aunque después se desechó aquella idea, por lo que, en 1996, el gobierno muncipal estaba todavía pendiente de definir los usos del espacio que se le había reservado.
Finalmente, la parte trasera del inmueble no se destinó a auditorio, sino a nuevas salas expositivas. Su inauguración tuvo lugar seis años más tarde, en el 2002.